El universo de las tablets ha crecido exponencialmente durante los últimos años. La explosión de la movilidad ha hecho que los fabricantes hayan desplegado todos sus encantos no solo en el consumo sino también para el ámbito corporativo con un amplio catálogo de tablet profesional.
A la hora de vender un tablet profesional, es necesario fijarse en ciertas cuestiones que serán claves para los trabajadores o autónomos que vayan a tener entre manos el dispositivo. Hacemos un repaso de las características a valorar para elegir el tablet profesional ideal.
Usos
No es lo mismo utilizar un tablet para ver películas y navegar por Internet que utilizar el dispositivo para leer informes o escribir correos electrónicos corporativos. Buscar la opción más adaptada a las necesidades empresariales, es un buen punto de partido.
Tamaños y formatos de pantalla
El mercado ofrece una amplísima oferta con modelos con pantalla desde siete pulgadas de diagonal. Los tamaños de referencia para el mercado profesional se sitúan entre 10 y 12 pulgadas con resoluciones nativas que van desde el HD al 2K. Las relaciones de aspecto más habituales en el plano profesional son 4:3-16:10.
No obstante, tamaños de pantalla más pequeños lograrán un menor peso mientras que pantallas mayores ofrecerán mayor productividad.
Chasis
En el terreno profesional se buscan modelos más robustos y de mejor acabado. Opciones premium con un chasis de aluminio que además de contener el peso y grosor, está testeado con especificaciones tipo militar MIL que garantiza protección ante caídas y golpes.
Hardware
Aún sin alcanzar el rendimiento de un ordenador portátil, el hardware interno de un tablet está capacitado para ofrecer unas prestaciones suficientes para mover el sistema operativo y aplicaciones, acompañado de gráficas integradas y de 2-4 Gbytes de memoria RAM instalada.
Conviene valorar en la compra la capacidad de almacenamiento ya que no suele ser ampliable y es muy inferior al de un ordenador portátil. También asegurarse del soporte para memorias microSD que nos permita aumentar la capacidad.
Conectividad
Un tablet por tamaño y diseño suele tener un menor número de puertos que un ordenador portátil aunque a cambio, incluye todo tipo de sensores: GPS, acelerómetro, giroscopio o brújula además de Wi-Fi o Bluetooth.
Sin embargo, como un profesional no puede depender únicamente de redes inalámbricas Wi-Fi, es necesario valorar la venta de un modelo que incluya soporte a redes de banda ancha móviles 3G/4G para una conectividad total e incluso para realizar llamadas de voz y/o videoconferencia desde cualquier lugar.
Autonomía
El tablet es el modelo a elegir para los que necesitan la mayor autonomía en un equipo informático, ya que ofrecen energía para todo un día de trabajo. Un aspecto clave para un usuario de negocios móvil.
Accesorios
Un tablet no es un convertible o 2 en 1 pero sí cuentan con accesorios interesantes que pueden venir muy bien a un usuario de negocios. Entre ellos destacan los teclados físicos que aumentan la productividad sobre los teclados virtuales o los lapices ópticos.
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