A escasos días de iniciar el nuevo curso escolar, es el momento propicio para ver como un mercado vertical como la educación puede ser muy rentable para los socios tecnológicos. Un nicho con muchas expectativas que, aún parado por la crisis, sigue siendo un fiel cliente año a año.
SIMO, convertido en una feria más de educación que de tecnología, es un fiel reflejo de la oportunidad de negocio que hay en los colegios e institutos. La mayoría de los fabricantes tecnológicos cuentan con una gama dedicada a este sector. Otros incluso han nacido a raíz de este boom TI en las aulas.
Aunque el recorte en educación ha sido más que evidente por parte de la Administración, cada vez más escolares tienen un ordenador en su clase –3,2 alumnos de media en 2012– y la banda ancha es una realidad en el 99% de los centros educativos españoles.
Al igual que hicimos con el sector de la sanidad, la hostelería, la banca y automoción, hoy miramos con ojos golosos la oportunidad de la educación como un mercado vertical a incluir en nuestro catálogo.
Antes de comenzar debemos tener en cuenta que estamos en un sector muy politizado donde las concesiones tecnológicas dadas por la Administración son complicadas de conseguir. Pero el negocio no solo está dentro de las aulas y tener la oferta más atractiva nos puede ayudar a entrar en un jugoso negocio:
Aulas inteligentes
Pizarras electrónicas con las que interactuar, proyectores o escritorios virtuales son alternativas ya reales a disposición de los alumnos. Aunque todavía no son la tónica general, cada vez más colegios ven en las nuevas tecnologías un aliado perfecto para invertir y rentabilizar a largo plazo.
Enseñanza digital
Tablets u ordenadores no terminan de llegar a las aulas. Nuestra media está lejos de la de otros países, pero es el momento de intentar introducir estos dispositivos, cada vez más asentados en el hogar de los menores con juegos educativos, en los colegios.
Junto a ellos, el desarrollo de plataformas de educación on-line son cada vez más demandas por un profesorado que necesita herramientas más dinámicas e innovadoras para captar la atención de unos niños que han nacido tecleando un tablet.
Internet
Quizás uno de los aspectos de los que más orgullosos nos podemos sentir en el sector educativo es de la implantación de Internet. Prácticamente ningún centro carece de una conexión de banda ancha. Sin embargo, ¿En qué condiciones se encuentra? ¿Ofrece realmente la cobertura necesaria? Y algo más importante aún tratándose de lugares con menores ¿Es plenamente seguras?.
Ser el aliado perfecto para proveer soluciones eficaces, accesibles y con una gestión sencilla son fundamentales para evitar posibles problemas.
Fuera del colegio
Pero la educación no solo está en la aulas. Los escolares «trabajan» también en casa o las bibliotecas donde necesitan un equipamiento tecnológico a la altura; equipos, pantallas, proyectores, libros electrónicos o dispositivos tan clásicos y prácticos como las calculadoras. ¿Tenemos una oferta a la altura?
