Las empresas quieren adoptar herramientas con IA. Los empleados quieren formación en IA para utilizar esta tecnología. Y mientras tanto, hay se cierne una gran oportunidad más sobre la cabeza de aquellos partners que tomen la delantera y sean capaces de ofrecer estos servicios.
La IA se enfrenta a uno de los mayores obstáculos que muchos estudios destacan: la falta de personal cualificado que permita desarrollar, integrar o implementar toda esa tecnología que se nos vende como revolucionaria.
Sin embargo, los perfiles especialistas en IA sólo representan el 0,3% del mercado laboral en la actualidad, según un estudio de Randstad Research. Y aunque 7 de cada 10 empleados demanda la formación en IA, todavía es una rara avis en las compañías.
Los perfiles especialistas en IA sólo representan el 0,3% del mercado laboral
Algunas industrias están adelantándose a la oleada y si que han comenzado con la formación. Un 71% de la industria manufacturera y un 64% del sector financiero están proporcionando capacitación a sus empleados, señala la investigación. Precisamente, los verticales donde su penetración está siendo mayor y por tanto, más beneficios están obteniendo de esta tecnología.
La oportunidad formativa
Ante sí los partners se encuentran una nueva demanda a la que pueden hacer frente: la formación en IA es un reclamo ya y el momento de ofrecer servicios alrededor de esta tecnología es ahora.
“La demanda de este tipo de empleados es muy grande en un mercado laboral que se caracteriza por la escasez de este tipo de perfiles”, afirma el director de Randstad Research.
Por lo pronto, la IA requiere la integración de perfiles expertos para su desarrollo, supervisión y adaptación, además de especialistas que aborden desafíos relacionados con la privacidad de datos y la trazabilidad de contenidos. Formaciones donde entra en juego el dotar a los empleados de nociones de matemáticas, estadística, informática o ingeniería. Trabajadores que pueden de diferentes departamentos y con diferentes conocimientos a los que adaptar un mensaje común: la IA va a cambiar su forma de trabajar y potenciará sus habilidades.
Además, la introducción de la IA requerirá el cambio en diversos roles dentro de las compañías. Algunos empleados tendrán que dedicar su tiempo a diferentes tareas, dejando paso a soluciones tecnológicas que se encarguen de aquellas de menor valor o más repetitivas. Un transformación empresarial donde los partners pueden ser también consultores y asesores.