1 de cada 4 solicitudes de patentes en España está relacionada con tecnologías sanitarias. El dato habla por sí solo y demuestra que el campo sanitario combina innovación y desarrollo de nuevos productos, soluciones e investigaciones.
Tecnología y sanidad están muy unidas, más aún en España donde el registro de patentes va en alza, liderado por el campo farmacéutico en España, el área tecnológica que más patentes registró de Europa. De hecho, en los últimos 10 años, España ha registrado el mayor aumento de solicitudes anuales de patentes europeas.
Los datos, de la Oficina Europea de Patentes, revelan que el auge de los inventos en España, que el año pasado presentaron una cifra récord con 2.111 solicitudes de patentes europeas, un 6,9% más que el año anterior.
CSIC, el organismo que más patentes ha solicitado en España
La biotecnología creció un 6,1% respecto al año anterior, pasando al tercer puesto de la lista y desplazando a la tecnología médica al cuarto lugar, que cayó un 14,3%.
Las biociencias, que incluyen los productos farmacéuticos, la tecnología médica y la biotecnología, siguen representando casi una cuarta parte de todas las solicitudes de patentes procedentes de España, como se desprende del reciente estudio «Patentes e innovación contra el cáncer», en el que España figura en el top 10 en cuanto a invenciones relacionadas con la lucha contra el cáncer.
El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha vuelto a ser el primer solicitante de patentes de España en la OEP (con 80 solicitudes presentadas). Un liderazgo que demuestra la importancia de la innovación en la sanidad y por supuesto, en la tecnología sanitaria.
Por su parte, Amadeus, Multiverse Computing y Telefónica destacan como las empresas privadas con más solicitudes de patentes el año pasado.
Tecnología sanitaria, en la cúspide
Aunque la propia sanidad todavía tiene mucho retos encima de la mesa, es cierto que en los últimos años el incremento de inventos, investigaciones y soluciones para enfrentarse a los desafíos se ha multiplicado. Todo ello motivado por la creciente inversión en tecnología sanitaria que vive nuestro país.
España se sitúa entre las primeras posiciones de centros neurálgicos sanitarios de Europa. La tecnología sanitaria supuso un negocio de 10.150 millones de euros en 2022. Tanto la investigación como los proyectos innovadores son fundamentales en esta inversión.
Y es que la tecnología ha demostrado que puede hacer mucho por la sanidad. Desde la digitalización de documentación hasta la mejora de escenarios tan complejos y delicados como los quirófanos o las salas de diagnósticos pasando por los laboratorios de investigación.
