TechnoVision, el programa global de Capgemini, ha adelantado cuáles serán las tendencias tecnológicas que imperarán a nivel global durante el próximo año. De este modo, los líderes empresariales obtienen un gran respaldo para tomar decisiones frente a las tecnologías emergentes, siendo la IA Generativa clave en el progreso de los negocios y la sociedad, tal y como ha ocurrido en 2023.
TechnoVision de Capgemini se publicará en enero de 2024, por lo que pretende ayudar a las empresas a alcanzar una etapa de madurez decisiva en sus decisiones estratégicas, contribuyendo también a solventar los retos más importantes que surgen a nivel empresarial y de sostenibilidad.
El valor de la IA Generativa
En este sentido, Pascual Brier, director de innovación de Capgemini y Miembro del Comité Ejecutivo del Grupo, asegura que la IA Generativa ha tenido un impacto transformador en la tecnología, por lo que si se sabe aprovechar correctamente se podrán anticipar a los retos tecnológicos del horizonte. Gracias a la IA Generativa, se consigue una tecnología más accesible, versátil y rentable a largo plazo.
La IA Generativa viene ocupando desde 2022 un papel prioritario en el sector tecnológico y de negocios. Los grandes LLM seguirán creciendo, aunque se irán construyendo modelos cada vez más pequeños para funcionar en instalaciones de espacio más reducido y con una capacidad de procesamiento limitada.
Las nuevas plataformas combinarán la IA Generativa con la información de alta calidad de los Knowledge Graphs
Las previsiones son que para 2024, las nuevas plataformas de IA combatan con el contenido generado por la propia imaginación, combinándose la IA Generativa con la información de alta calidad de los Knowledge Graphs. De este modo, sin necesidad de grandes conocimientos técnicos, se podrán crear redes interconectadas de modelos diseñados para tareas específicas, creando ecosistemas generativos multiagente.
El poder de los semiconductores
La Ley de Moore fija que la potencia de cálculo de un microchip se duplica cada dos años, a la par que su coste se reduce a la mitad. Se está implantando una nueva era transformadora de cara a 2024, en la que los chips están alcanzando los 2nm y los transistores toman un tamaño de unos pocos átomos.
Cada vez se invierte más en I+D y en instalaciones de fabricación de vanguardia. Se habla de avances en el apilamiento de chips 3D, innovaciones en la ciencia de los materiales y nuevas formas de litografía que aumenten la potencia informática. Estas mejoras irrumpirán en los sectores de los centros de datos, vehículos eléctricos y telecomunicaciones con la aparición de nuevas gigafábricas, normativas y servicios de función.
La trascendencia de las baterías
El objetivo es mejorar el rendimiento y reducir el coste de las baterías, tanto en empresas como gobiernos. Para ello, será conveniente impulsar la movilidad eléctrica y acelerar el almacenamiento de energía de larga duración.
Las baterías sin cobalto o en estado sólido serán la alternativa al LFP y el NMC
El LFP (ferrofosfato de litio) y el NMC (níquel manganeso cobalto) son clave para los vehículos eléctricos, pero se están buscando alternativas como baterías sin cobalto o en estado sólido. Presentan mayores densidades de energía a un precio inferior que las baterías tradicionales, reduciendo la dependencia de los materiales más contaminantes y ganando seguridad.
Tecnologías cuánticas
Ante las amenazas cibernéticas latentes, la computación cuántica cobra especial peso en sustitución de los estándares actuales de cifrado como RSA y ECC. Si se establecen algoritmos resistentes a la tecnología cuántica se logrará mantener la privacidad y la seguridad de los datos en el futuro.
En este aspecto, TechnoVision recuerda que el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología de EEUU anunciará en 2024 los estándares para la ‘criptografía post-cuántica’ (PQC), es decir, el cifrado óptimo como resistencia a los ataques cuánticos.
La Ley de Preparación para la Ciberseguridad de la Computación Cuántica recoge que todas las organizaciones públicas y privadas que suministran al gobierno de EEUU se preparen para migrar a PQC en un año tras la publicación de las normas NIST.
Tecnología espacial, como método para abordar desafíos de la Tierra
El monitoreo de los riesgos y los desastres climáticos, la defensa, la soberanía y una mejora de las telecomunicaciones serán una gran prioridad. Los agentes privados también intervendrán, gracias al apoyo de tecnologías como el 5G, sistemas avanzados de satélite, big data o computación cuántica.
El auge en 2024 de tecnologías como el 5G, sistemas avanzados de satélite, big data o computación cuántica
De ahí que para 2024 se espere que se respalden proyectos tecnológicos muy prometedores en pro de la propulsión sostenible de naves espaciales, tanto eléctricas como nucleares, así como nuevas constelaciones de órbita terrestre baja para comunicaciones fluidas y criptografía cuántica.
Las previsiones del siguiente lustro, más allá del 2024
En primer lugar se habla del hidrógeno bajo en carbono, como una alternativa a los combustibles fósiles. Se empleará energía renovable o nuclear para alimentar la electrólisis del agua, dividiéndola en hidrógeno y oxígeno con cero emisiones de carbono. Se aplicarán electrolizadores de membrana de intercambio de protones (PEM) y de óxido sólido.
Otro reto será acelerar la descarbonización de procesos con alto contenido de carbono. Muchos sectores invertirán en tecnologías de captura de carbono para alcanzar los retos, ya que los métodos de CO2 son cada vez más eficientes y consumen menos energía. Para ello se precisarán inversiones públicas, especialmente de la UE y EEUU.
La aceleración de la descarbonización de procesos con alto contenido de carbono
Para su desarrollo será fundamental desarrollar tecnologías avanzadas de disolventes que precisan de energía para capturar, utilizar y almacenar CO2. También se precisarán sorbentes sólidos que ofrezcan un menor coste y una mayor selectividad.
Por último, la biología sintética también cobrará especial protagonismo como método de protección de la salud pública en el desarrollo de vacunas. Si se combinan la biología, la ingeniería, la informática y la biotecnología se pueden extraer aplicaciones revolucionarias basadas en células y organismos programables para fabricar nuevos medicamentos, materiales sostenibles y productos químicos ecológicos. A esto se suman avances en la edición de genes para curar trastornos genéticos.
