Aptum ha revelado la primera parte de su Estudio Anual de Impacto en la Nube 2023, Clear skies ahead: avoiding chaos in the cloud. Tal y como se recoge, el 98% de los encuestados se ha mostrado satisfecho con los aportes de la nube en su actividad empresarial, sin embargo afirman que aún quedan desafíos en torno a la gestión y a la optimización del gasto en la nube.
Aptum ha recopilado en el estudio las opiniones de 400 profesionales sénior de TI de diferentes empresas que cuentan con más de 250 empleados en Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, con la finalidad de comprender mejor la infraestructura de computación en la nube y superar sus complejidades.
Fueron muchas las organizaciones que decidieron implementar los servicios en la nube durante la pandemia, y ahora se encuentran en situaciones complejas, y es que muchas de ellas están pagando el precio de implementar la nube sin el beneficio de una estrategia de gestión integral.
El 85% de los encuestados reconoce que la nube no es una solución única
El estudio refleja cuales son los desafíos más destacados a los que las empresas deben ahora hacer frente, tales como la integración, la entrega de previsibilidad de costos, la falta de habilidades y los cambios en la tecnología. Así pues, más del 70% de los profesionales preguntados afirma que los costos de la nube han resultado ser más elevado de lo que esperaban en un principio.
Por otro lado, aparecen también los procesos de integración con un 42% y la falta de talento con un 33% como desafíos relevantes a los que hacer frente. El estudio hace también alusión a que el 85% de los encuestados reconoce que la nube no es una solución única, mostrando así también las debilidades que presenta.
Los líderes de TI que dan prioridad a factores tales como la seguridad, la gobernanza y el cumplimiento de los datos, tienden a decantarse por un entorno de nube privada, mientras que las empresas que buscan mayor flexibilidad eligen la opción de nube pública, ya que reducen con ella la necesidad de una gran inversión de capital y se puede implementar más rápidamente.
Sin embargo en cuestiones de entornos múltiples de nubes apenas superan los costos. De esta forma el 51% de los encuestados por Aptum afirmó que la nube es una parte esencial en su estrategia para sortear los costos de la recesión económica en curso.
Aunque la predicción sobre los gastos en tecnología de nube pública se estima que aumente algo más de un 20% a lo largo del 2023, a más de 591.000 millones de dólares, la firma de analistas insiste a los CIO y líderes de tecnología de la información a que optimicen el gasto en la nube para así mantener los niveles de servicio a medida que se disparan los costos de energía e inflación.
Para gestionar el control y la optimización de las arquitecturas en la nube, desde el estudio de Aptum se recomiendan una serie de acciones que llevar a cabo. Por un lado, evaluar la infraestructura, los servicios y las aplicaciones en la nube, identificando con ello las áreas de ineficiencias, redundancias y desalineación con los objetivos comerciales.
Otra recomendación es la de establecer pautas y políticas para el uso de los recursos de la nube, tales como la asignación de presupuesto, el control de costos y la generación de informes.
Una tercera recomendación es el empleo de herramientas nativas de la nube o de terceros para automatizar tareas repetitivas, como el aprovisionamiento, el escalado y la implementación. Con ello se identificará y remediará las ineficiencias, se reducirá el riesgo de los errores humanos y se optimizará la gestión.
La directora ejecutiva de Aptum, Susan Bowen, afirmó que:
“La tecnología en la nube continúa permitiendo la agilidad, la escalabilidad, el ahorro de costos y el trabajo remoto, todos componentes esenciales para la continuidad y el crecimiento del negocio en tiempos turbulentos (…) si no se administra de manera efectiva con un enfoque holístico, se pueden perder los beneficios de la nube”