Cuando las empresas piensan en crecer, una de las vías para hacerlo es la internacionalización. En esto, Europa es un territorio con mucho potencial por las medidas comunitarias que alberga y donde el comercio electrónico tiene un gran aliado. Consciente de ello, Amazon ha lanzado una nueva herramienta para ayudar a sus vendedores a utilizar este espacio comercial común aún más.
El Acelerador de Expansión Europea (EEA por sus siglas en inglés) que Amazon ha lanzado permite a los vendedores comenzar a comercializar sus productos en 9 tiendas europeas. Su objetivo es que la configuración se haga en dos clics y permita ampliar la cobertura a la que llegan sus productos.
Entre los países seleccionados están Francia, Alemania, Italia, España, Países Bajos, Polonia, Suecia, Bélgica y Reino Unido. Territorios que las empresas podrán explorar con sus productos y ver la viabilidad comercial que pueden tener.
Así, las empresas podrán ver en qué mercados europeos todavía no están presentes y poder adentrarse de una manera más rápida y sencilla.
Internacionalización a un paso
La venta online promueve y aúpa los procesos de internacionalización. Estamos de acuerdo que no es lo mismo vender fuera de nuestras fronteras, pero también debemos tener en cuenta que hay un mercado potencial que descubrir y que, de la mano del comercio electrónico, es mucho más sencillo alcanzarlo.
En España el 20% de las compras ya se realiza por Internet. Un porcentaje que está en la parte alta de la media europea y que va a más en todos los territorios. No en vano, el 45% de las empresas espera invertir en este entorno para adaptarse a los nuevos hábitos de consumo y enriquecer la experiencia que ofrecen a sus clientes, aportando un nuevo canal de compras.
El 45% de las empresas espera invertir en comercio electrónico en 2023
Y es que este nuevo espacio permite un rápido despliegue y la ampliación de nuevos consumidores. En el caso de Europa hablamos de 447 millones de habitantes que son potenciales compradores de nuestros productos.
Por supuesto, la internacionalización conlleva más implicaciones. Gestión de la cadena de suministro, tiempo para conocer el mercado, establecimiento de apoyos locales, conocimiento de las reglas que imperan en cada país y por supuesto, un exhaustivo análisis para detectar el valor que podemos detectar en ese mercado. Sin embargo, una vez conseguido, puede ser una fuente más de ingresos que ayude a seguir aumentando el negocio.