Según el último informe emitido por Canalys, los primeros tres meses de 2023 se cierran con unos datos realmente preocupantes para la industria de los ordenadores. Y es que los proveedores tan solo enviaron 54 millones de unidades en todo el mundo, es decir, 26 millones menos que en el mismo período de 2022. Traducido en porcentaje de ventas estamos hablando de una reducción del 33%.
Aunque durante la pandemia las ventas de ordenadores se incrementaron debido a la implantación del teletrabajo y la formación a distancia, se ha entrado en una etapa de decadencia sin frenos. La recesión económica que afecta a todo el mundo está repercutiendo negativamente en la aparición de actualizaciones para PC, y por ende, al desarrollo del sector.
IDC también publicó su último informe ‘Q123 Worldwide Quarterly PC Device Tracker’, en el cual recogió un descenso de las ventas de más de un 10% o lo que es lo mismo, una media de 23,3 millones de PC enviados durante los últimos años. Se trata de la cuarta caída trimestral consecutiva, aunque es la más pronunciada.
Los datos actuales repercutirán directamente en los proveedores al acumular un mayor stock
El analista jefe de canales, asociaciones y ecosistemas de Canalys, Jay McBain, considera que estos datos tan negativos repercutirán directamente en los proveedores, ya que acumularán un mayor stock de nuevos dispositivos y se mantendrán en circulación las unidades antiguas que son más difíciles de reparar, administrar y proteger frente a amenazas.
Según datos de Canalys, esta circunstancia también ha supuesto un grave golpe para Apple, que envió 3,3 millones de Mac durante el último trimestre, bastante menos que los 5,4 millones enviados hace un año (una reducción del 45%). Por consiguiente, su cuota de mercado pasó del 9,3% al 7,5%.
Otras firmas como Dell y Lenovo experimentaron la mayor caída en número de ventas. Mientras que Lenovo envió 12,7 millones de PC (descenso del 30% con respecto a los 18,3 millones del año anterior), Dell envió 9,5 millones de unidades, una reducción del 31%. Otras firmas como HP también se vieron afectadas, vendiendo durante el primer trimestre 12 millones de PC, un 24% menos que durante el pasado año. Aún así, lograron recuperar dos puntos de ganancias en acciones pasando del 19,7% al 22,2%.
Como era de esperar, el abrupto descenso de las ventas ha provocado una importante acumulación de stock. Sin ir más lejos, las ventas de Navidad no alcanzaron las cifras pronosticadas, de tal modo que muchas unidades quedaron almacenadas. El analista senior, Ishan Dutt, señaló que el 39% de los proveedores encuestados aseguraron que contaban con cinco semanas de inventario, mientras que el 18% aseguró que tenía un inventario de, al menos, nueve semanas.
La situación no se prevé que mejore, pues los analistas aseguran que el control de la inflación sigue siendo una prioridad en EEUU y Europa, por lo que se espera que las compras de PC se sigan aplazando a corto plazo. No obstante, a partir del último trimestre de 2023, se espera que el mercado se recupere significativamente y que los niveles de stock se reduzcan.
Junto a los ordenadores, el descenso de ventas también ha afectado a las tablets, de tal modo que según datos del informe de IDC se estima que éstas serán de un 12% con respecto a 2022, es decir, de unos 124 millones de unidades.
El vicepresidente de investigación de IDC, Linn Huang, asegura que en 2024 comenzarán a llegar las actualizaciones, comprándose nuevos equipos, pero también apostando las escuelas por sustituir los antiguos Chromebook y las empresas por instalar Windows 11. No obstante, los usuarios están aguantando más con sus primitivos ordenadores debido al valor que ha cobrado el trabajo en la nube, buscando soluciones temporales a su hardware.
Josh Liberman, presidente de Net Sciences, asegura que el hardware representa el 20% de los ingresos, por lo que si los usuarios apuestan por mantener máquinas más antiguas éstas precisarán de un mayor soporte debido a la sobrecarga del sistema operativo.
El índice de precios tampoco contribuye a la actualización de los equipos. Salvo la memoria RAM y los SSD, el resto de hardware ha subido de precio, siendo los que más se han incrementado las tarjetas gráficas, sobre todo las de NVIDIA. Ese encarecimiento del hardware dificulta seriamente las actualizaciones por parte de los usuarios.
En 2024, o como tarde en 2025, se lanzará el nuevo sistema operativo Windows 12, el cual presentará nuevas limitaciones y restricciones artificiales que obligará al usuario a actualizar su equipo.