Cada vez son más las marcas y empresas que apuestan por el ‘live commerce’. Este uso de retransmisiones en directo para comercializar, promocionar, o vender productos y servicios sigue al alza, lo que hace cada vez más imprescindible conocer cómo aprovecharlo al máximo.
El ‘live commerce’ ya es un mercado que mueve 600.000 millones de dólares. En el resto del mundo, la pandemia llevó a las marcas a pensar en el uso de las tecnologías de transmisión en directo para llegar a sus clientes e interactuar con ellos durante los cierres obligatorios.
Si bien muchos retailers adoptaron se inclinaron por el ‘live commerce’ y vieron cómo conllevaba un importante crecimiento en la satisfacción del cliente y el retorno de la inversión, otros todavía están indecisos. Esto probablemente se deba a los mitos que rodean a esta tecnología, por lo que es fundamental destaparlos para impulsar su adopción.
Este es uno de los grandes mitos que existen hoy en día, ya que, si bien la tienda física sigue teniendo tirón entre los clientes, no la preferirán a menos que proporcione una experiencia de compra que supere la de otros canales.
El ‘live commerce’ es solo una extensión de las compras online, que la mayoría de las marcas ya han adoptado. Según Nielson Norman Group, la principal razón por la que los clientes recurren a las compras online es la facilidad y la comodidad.
Añadir compras en directo al conjunto de herramientas del retailer es una solución perfecta para mejorar la experiencia de compra y que los clientes puedan obtener la misma atención que recibirían en la tienda.
Personal capacitado con equipos con un coste relativamente bajo y un espacio tranquilo son los requisitos mínimos que se necesita para empezar
Indudablemente, se trata de otro mito nada más alejado de la realidad. Con un smartphone y unos auriculares ya se pueden aprovechar las bondades del ‘live commerce’.
Muchas marcas creen que necesitan invertir en equipos costosos, e incluso los estudios son un requisito, cuando no es así. La combinación de personal capacitado con equipos con un coste relativamente bajo y un espacio tranquilo son los requisitos mínimos que se necesita para empezar.
Se trata de otro de los grandes mitos ya que, completamente implementado, probablemente sí tendrá un impacto en los ingresos.
El retorno de la inversión (ROI) es un factor imparte para las marcas que buscan incorporar tecnología a su configuración actual. Pero, cuando se trata de incorporar la opción del ‘live commerce’, las posibilidades de que impacte positivamente en los ingresos son muchas.
En este sentido, también es importante evaluar el éxito de las compras con otras métricas. La satisfacción del cliente a menudo se dispara cuando las marcas implementan el ‘live commerce’, ya que pueden obtener más información sobre un producto interactuando con un sin tener que abandonar la comodidad de su hogar.
Como resultado, las marcas también pueden experimentar una reducción en las devoluciones a medida que los compradores se sienten más seguros con sus compras.
Para algunos, utilizar el ‘live commerce’ para impulsar sus ventas es algo que está de moda pero que no tendrá un gran recorrido. Es otro mito.
Los ingresos globales del ‘live commerce’ serán de 600.000 millones de dólares en 2023, un crecimiento del 300% respecto a 2021
El ‘live commerce’ ya se ha convertido en una parte integral de los hábitos de compra en Asia. Por ejemplo, en China, esta industria ha pasado de generar ventas por 2.850 millones de dólares en 2017 a 144.150 millones, en 2020.
Se espera que esta tendencia ascendente siga en los próximos años. Según McKinsey, podría representar hasta el 20% de las compras en 2026. De hecho, las previsiones globales apuntan que los ingresos del ‘live commerce’ serán de aproximadamente 600.000 millones de dólares en 2023, un crecimiento de aproximadamente el 300% respecto a 2021.
Ser de los primeros en adoptar el ‘live commerce’ dará a las marcas la oportunidad de sorprender a sus clientes, obteniendo una ventaja competitiva sobre sus competidores.
Imagen inicial | Libby Penner