La preferencia de las organizaciones por los servicios digitales frente a los productos convertirá al canal TI en un aliado clave para su creación este 2023.
Ante el actual contexto macroeconómico marcado por la incertidumbre, el 76% de las empresas europeas considera clave elegir bien las inversiones que apoyan la estrategia TI. Sin embargo, los datos de IDC Spain apuntan que el 40% de los ingresos de las organizaciones procederá de la venta de productos y servicios digitales.
Esto conllevará la necesidad de evolucionar el modelo de TI de las organizaciones algo que, sin dura, afectará al canal TI. La creciente importancia de las soluciones frente a los productos impulsará el papel del partner en la creación de productos y servicios a lo largo de este 2023.
Según IDC, tres son los factores que influirán en la relevancia que adquirirá el canal TI este año; la adopción de la nube hacia modelos de consumo flexible, la sostenibilidad de operaciones, y la protección ante la rotura de la cadena de suministro.
El avance de la nube
La nube se erige como base para la prestación de servicios, lo que se configura como una palanca de transformación del canal. Así, el 27% del canal ya está adoptando modelos de consumo flexibles.
No obstante, no es suficiente con adoptar este tipo de modelos de consumo sino que también son necesarios los programas de canal en los que la escasez de habilidades se ha convertido en el principal inhibidor en las organizaciones.
Pero los partners también pondrán el foco en la sostenibilidad. Minimizar el coste energético de los centros de datos se convertirá en un aspecto clave de los negocios y que impulsará el paso a la nube del canal.
Según apunta IDC, esto llevará a una clara tendencia hacia el negocio basado en la prestación servicios en la nube con el objetivo de tener costes más eficientes, minimizar la huella de carbono y adaptarse a los requerimientos del cliente. Con ello, las soluciones basadas en tecnologías de tercera plataforma como Inteligencia Artificial, seguridad o aplicaciones informáticas serán elementos clave de su porfolio.
Esto también llevará a una creciente preocupación por el seguimiento de la huella de carbono. Según los datos de IDC, en 2026, el rendimiento ESG (gobierno ambiental, social y corporativo) se considerará uno de los tres principales factores de decisión en la compra de equipos informáticos. Asimismo, más de la mitad de las licitaciones incluirán métricas sobre las emisiones de carbono el uso de materiales y las condiciones laborales.
Optimizando la cadena de suministro del canal TI
Los datos de la encuesta de IDC también indican que las áreas de cuestiones ESG se están ampliando. Además de la información sobre las emisiones de carbono, las solicitudes de propuestas en el contexto de las compras de infraestructuras informáticas también preguntan por la gestión de los residuos y la circularidad de las cadenas de valor, así como por el impacto social de esas cadenas de valor.
Y es que la cadena de suministro jugará un papel clave. Los partners requerirán una colaboración más estrecha con los clientes que permita anticiparse o prever fechas de entrega en los plazos requeridos.
Imagen inicial | Scott Graham