Las principales firmas de análisis de mercado pronostican que el gasto tecnológico mundial seguirá creciendo en 2023, un año complejo marcado por la confluencia de factores como la inflación, la amenaza de recesión, la guerra de Ucrania o la crisis energética. Es en este contexto en el que un equipo de especialistas en cloud de Syntax España ha realizado un análisis para anticipar las tendencias que definirán la evolución de las inversiones en cloud y de los proyectos que lleven a cabo las organizaciones durante los próximos doce meses.
“Está claro que los presupuestos tecnológicos de las empresas y su reparto se va a ver impactado por este escenario de incertidumbre pero, al mismo tiempo, estamos en un momento de aceleración de las iniciativas digitales para alcanzar, a través de la tecnología, la agilidad y la flexibilidad o resiliencia que necesitan las empresas para ser competitivas, y más en un panorama adverso como el actual», subraya Chabier Sanvicente, director general de la compañía en España y vicepresidente de IT a nivel global.
Por ello, en línea con los pronósticos de las grandes consultoras, Syntax considera que los proyectos cloud van a estar en los primeros puestos de la lista en las agendas de los CIOs, como base de sus procesos de transformación digital e instrumento clave para sostener sus estrategias de negocio a través de la eficiencia en sus operaciones, capacidad para tomar decisiones y realizar cambios rápidos, y generar una oferta digital que alto valor.
Sus especialistas han concluido que las iniciativas en la nube que se realicen en 2022 van a seguir las siguientes tendencias:
Con el estado de madurez alcanzado por el modelo de TI, las empresas quieren dar un paso más y sacar el máximo partido a su potencial. Conocen ya, por los despliegues anteriores realizados, sus ventajas de escala, control de costes, time-to-market y flexibilidad, por lo que ahora buscan la resiliencia estratégica.
En este punto, los expertos de Syntax explican que capturar el 100% del valor del modelo lleva asociado una apuesta por la migración completa de los sistemas a cloud y la creación de una infraestructura digital que dé soporte a todas las operaciones y procesos estandarizados, además de impulsar una simplificación de las TI. Asimismo, subrayan que estos proyectos serán críticos, por lo que cobrarán relevancia las fases de evaluación y planificación y, por tanto, los servicios de consultoría serán esenciales para lograr una alineación perfecta entre la estrategia cloud y los objetivos de negocio.
Los equipos de tecnología necesitan mucha flexibilidad para desplegar y gestionar los entornos cloud, automatizando procesos repetitivos que reduzcan las tareas manuales en la provisión de los servicios, su configuración y gestión. En este ámbito, será necesario un trabajo previo de identificación de objetivos, localización de acciones recurrentes que consumen mucho tiempo y crear una hoja de ruta para cumplir las expectativas que se plantean.
Los beneficios de un proyecto de automatización cloud son muy visibles en los despliegues masivos de entornos en cientos de servidores en paralelo, pero no se deben obviar las que se obtienen de mantener y actualizar la infraestructura. Syntax cree que las organizaciones de TI van a impulsar este tipo de proyectos para simplificar procesos como la gestión de parches, actualizaciones y monitorización, al mismo tiempo que se gana rapidez y se estandarizan los procesos. Todo ello redunda en una gestión más ágil y menos personal necesario, que puede dedicarse a tareas de más valor.
De ella depende el éxito de muchos proyectos. Es un aspecto que ya estaba en el punto de mira de aquellas empresas que querían optimizar su infraestructura y obtener más valor de sus inversiones. El escenario económico actual hará que, durante 2023, muchos departamentos de TI liderarán iniciativas de control de costes, a través de un mayor control y proyectos que faciliten el equilibrio entre los recursos consumidos y los costes para aumentar la eficiencia.
Para lograr la adecuada gestión financiera, habrá que aplicar una adecuada gestión financiera de los costes en la nube para tomar decisiones de gasto basadas en datos que, en el caso de Syntax, es FinOps. Con esta metodología, las compañías pueden redimensionar la infraestructura en línea con sus necesidades, reducir los costes del almacenamiento, acogerse a los planes de ahorros de las diferentes plataformas cloud y establecer una estrategia continuada de gestión financiera cloud.
En un momento de clara expansión del gasto en transformación digital y también de las ciberamenazas, la seguridad cobra una importancia capital. Por eso, más que nunca, las empresas priorizarán la protección de las infraestructuras cloud porque es fundamental para que las iniciativas digitales creen nuevas fuentes de valor y generen eficiencias operativas.
La ciberseguridad, que es un asunto que está tanto en la agenda de los CIOs y de la alta dirección, debe incluirse desde el principio en los proyectos cloud, y tener en cuenta todos los riesgos y variables que impactarán en la solidez de la postura de seguridad empresarial, garantizando la protección de las cargas de trabajo y los sistemas con los que interoperan, su exposición a Internet, y la configuración de los servicios.
Las empresas están impulsando sus estrategias de sostenibilidad, tanto por los cambios en el entorno normativo como de consumo. De hecho, más del 80% de los 3.000 CEOs encuestados a nivel mundial por el IBM for Business Value (IBV) creen que sus avances en este campo les ayudarán a mejorar el rendimiento de sus organizaciones.
Por esta razón, la firma piensa que en 2023 parte de las inversiones en cloud vendrán motivadas por la prioridad de reducir las emisiones y ser más eficientes energéticamente. En este sentido, según datos de IDC, la migración de aplicaciones y datos a este entorno permite reducir el consumo de energía hasta en un 30%.
Finalmente, el análisis de los especialistas de Syntax muestra que las empresas van a abordar proyectos de integración de sus diferentes entornos cloud para facilitar las operaciones sin puntos de fricción y que seguirá la consolidación del modelo XaaS, en el que toda la tecnología se consume como servicio. Son tendencias que ya cobraron fuerza en 2021 y 2022, y que están plenamente consolidadas y en auge.
Según Ricardo Casanovas, vicepresidente global de Productos SAP e Innovación en Syntax, «muchas empresas ya son conscientes de la capacidad de la nube para impulsar la innovación digital a escala en toda la organización. Creemos que el próximo año se van a poner en marcha numerosos proyectos con tecnologías diferenciales como la Inteligencia Artificial, Analítica o Internet de las Cosas, que les permitan generar ventajas competitivas».