Las previsiones apuntan que este 2022 el mercado de semiconductores crecerá un 4% hasta alcanzar los 618.000 millones de dólares. Sin embargo, el próximo año los ingresos globales experimentarán un descenso del 3,6% debido al impacto de la delicada situación económica.
El pronóstico a corto plazo para los ingresos de los semiconductores ha empeorado como consecuencia de la coyuntura macroeconómica y del debilitamiento de la demanda de los consumidores. Esto llevará a que los ingresos globales de semiconductores disminuirán un 3,6% en 2023, según las previsiones de Gartner.
Si se espera que 2022 cerrara con un crecimiento del 4% hasta los 618 .000 millones de dólares, de cara al próximo año se prevé que estos ingresos se sitúen en los 596.000 millones, lo que está por debajo del pronóstico inicial, que apuntaba a 623.000 millones de dólares.
Actualmente, el mercado de semiconductores está polarizado entre los mercados impulsados por el consumidor y los mercados impulsados por las empresas. La debilidad de los primeros se debe, en gran medida, a la disminución de la renta disponible de los consumidores provocada por el aumento de la inflación y las tasas de interés. Pero también por la reorientación del gasto discrecional del consumidor hacia otras áreas, como los viajes, el ocio y el entretenimiento, que están teniendo un efecto negativo en las compras de tecnología.
Los mercados impulsados por empresas proviene de las inversiones estratégicas por fortalecer su infraestructura
Por otro lado, los mercados impulsados por las empresas, como las redes empresariales, la computación empresarial, el transporte industrial, médico y comercial, hasta ahora han sido relativamente resistentes a pesar de la inminente desaceleración macroeconómica y las preocupaciones geopolíticas.
La fortaleza en estos mercados impulsados por empresas proviene de las inversiones estratégicas de las corporaciones que buscan fortalecer su infraestructura para continuar respaldando su trabajo desde el hogar, los planes de expansión comercial y las estrategias de digitalización en curso.
Una demanda de semiconductores a la baja
Para el resto de 2022, el mercado de la memoria será testigo de una demanda vacilante, inventarios hinchados y clientes que presionan por precios considerablemente más bajos. Como resultado, el mercado de la memoria se mantendrá estable en 2022 y se prevé que sus ingresos disminuyan un 16,2% en 2023.
El empeoramiento de las perspectivas económicas está afectando negativamente a la producción de smartphones, PC y productos electrónicos de consumo, lo que está posicionando el mercado de DRAM para un exceso de oferta durante el resto de 2022 y los tres primeros trimestres de 2023.
Los ingresos de memorias DRAM caerán un 2,6% este año y un 18% en 2023
Los analistas de Gartner prevén que los ingresos de DRAM disminuyan un 2,6% hasta alcanzar los 90.500 millones de dólares en 2022 y disminuirá aún más. un 18 % en 2023, hasta los 74.200 millones de dólares.
La interrupción de la fabricación de las memorias NAND que tuvo lugar durante el primer trimestre de 2022 aumentó los precios y enmascaró el entorno de demanda que se deteriora rápidamente, lo que resultó en un exceso de inventario en el tercer trimestre de 2022 que se espera que continúe en la primera mitad de 2023. Se proyecta que los ingresos de NAND aumenten un 4,4% hasta los 68.800 millones de dólares en 2022, pero está en camino de disminuir 13,7% en 2023 hasta los 59.400 millones.
Según Gartner, si bien el deterioro del entorno macroeconómico debilitará la demanda de los consumidores, se espera que el consumo de semiconductores mejore relativamente con las inversiones comerciales. En consecuencia, mercados como el industrial, la infraestructura de telecomunicaciones y el centro de datos se verán menos afectados por el gasto del consumidor a corto plazo.
Imagen inicial | Umberto
