La crisis que ha vivido la cadena de suministro en los últimos tiempos podría llegar a su fin. Según un estudio de IFS, la falta de materias primas, componentes y accesos podría terminar a finales de este mismo año.
El impacto que ha tenido las interrupciones de la cadena de suministro en todo el mundo ha conllevado importantes pérdidas para muchos negocios a lo largo de estos últimos trimestres. Sin embargo, la pesadilla podría llegar a su fin, presumiblemente, a lo largo de la próxima Navidad.
Así al menos se desprende del estudio realizado por la compañía de soluciones empresariales, IFS, a partir de las entrevistas realizadas a más de 1.450 altos cargos de grandes organizaciones de todo el mundo. Una de las principales conclusiones que se extrae es que el 57% de los directivos se muestran optimistas ante el inminente fin de las interrupciones de negocio a las que se enfrentan actualmente por la falta de acceso, materias primas o componentes en la cadena de suministro.
De confirmarse estas buenas previsiones, esta crisis terminaría a finales de 2022 coincidiendo con las fechas navideñas. Una buena noticia que parecía que no iba a llegar nunca antes los diferentes pronósticos que se hacían públicos y que cada vez ponían un final más lejano en el tiempo.
El 72% de las organizaciones se inclina por abastecerse principalmente de proveedores nacionales
Por otro lado, el informe también destaca que, con el objetivo de mitigar el impacto de estas interrupciones en la cadena de suministro, muchas de estas organizaciones están llevando a cabo medidas provisionales. Entre ellas, el 66% de los directivos encuestados señala la disponibilidad de más existencias.
Asimismo, el 70% aboga por aumentar el número de proveedores con los que trabajan de cara a ampliar su abanico de posibilidades, si bien el 72% se inclina por abastecerse principalmente de proveedores nacionales.
No obstante, desde IFS apuntan que estas acciones pueden incurrir en ineficiencias y afectar negativamente en la agilidad de las organizaciones a la hora de desarrollar su actividad, lo que puede lastrar al sector en general.
En este escenario, las empresas están adoptando una perspectiva más eficiente para reforzar sus capacidades de gestión de la cadena de suministro. Y es que, para el 37% de los encuestados en este estudio, esta gestión es una de las tres principales prioridades que tienen a la hora de invertir en tecnología para optimizar su eficiencia.
¿Es necesaria esta inversión a largo plazo? Desde IFS, la directora de Industria Global para Fabricación, Maggie Slowik, esta optimista previsión del fin de las interrupciones en la cadena de suministro no tiene visos de cumplirse.
“Con la disrupción en curso, las organizaciones deben centrarse urgentemente en hacer que sus cadenas de suministro sean eficientes a largo plazo, asegurándose de abordar la economía circular y mantenerse a la vanguardia con tecnología moderna que les brinde visibilidad de extremo a extremo.”
Imagen inicial | Hannes Egler