Si bien en los últimos meses los cascos de Realidad Aumentada (RA) han experimentado un descenso, se espera que en los próximos años inicien su despegue de cara a una amplia adopción.
De acuerdo con los datos que maneja IDC, se prevé que las ventas de cascos de Realidad Aumentada (RA) experimenten un descenso del 8,7% interanual situándose en 260.000 unidades a finales de este 2022.
Esta desaceleración puede parecer algo abrupta teniendo en cuenta que se trata de una tecnología muy incipiente. No obstante, las ventas ya llevan meses ralentizándose ante la inestabilidad económica y cómo está afectando a las grandes empresas, así como por la falta de nuevos dispositivos.
A lo largo de la primera mitad del año, los principales fabricantes de cascos han sido Microsoft, Shadow Creator, Mad Gaze y RealWear. Sin embargo, se espera que el panorama cambie drásticamente a medida que más empresas entren en este mercado.
Así, grandes empresas tecnológicas como Apple y Meta aumentarán su interés en la Realidad Aumentada.
A pesar de esta desaceleración, IDC confía en que, de cara al futuro, experimente un gran crecimiento. Las previsiones apuntan a un crecimiento con una tasa anual compuesta (CAGR) durante cinco años del 70,3%, alcanzando un máximo de 4,1 millones de unidades a finales de 2026.
En palabras de Jitesh Ubrani, responsable de investigación de Mobility and Consumer Device Trackers de IDC, si bien estamos a años de la adopción masiva de las gafas de Realidad Virtual por parte de los consumidores, el plazo más corto para estos productos sería a finales de 2024 o principios de 2025.
“Compañías como Apple, Meta y otras usan lo que han aprendido sobre cascos de Realidad Virtual para lanzar al mercado un diseño más optimizado y amigable para el consumidor de gafas de Realidad Aumentada”.
En este sentido, si bien la Realidad Aumentada seguirá creciendo principalmente en el segmento de consumo, la mayoría de productos serán más parecidos a gafas o auriculares en lugar de gafas, lo que será considerado un fracaso para muchos.
A tenor de los datos que maneja IDC, la mayoría de los envíos de cascos de Realidad Aumentada hasta la fecha se han realizado en el lado comercial. Estas empresas muestran mayor predisposición y son capaces de realizar las inversiones necesarias, no solo en el hardware, sino también en el software y los servicios necesarios que pueden generar un claro retorno de la inversión.
Ante este panorama, desde IDC confía en que los envíos comerciales impulsen este segmento de mercado hasta, al menos, 2026 a medida que más empresas adopten los cascos de Realidad Aumentada.
Imagen inicial | Vinicius «amnx» Amano