El teletrabajo o las fórmulas de trabajo híbrido se han impuesto en muchas organizaciones. Un modelo que trae consigo muchos cambios de hábitos con sus beneficios y desventajas que si está implementado de la manera correcta. Sobre ello ha querido indagar NFON con un estudio europeo que también ha contado con la participación de trabajadores españoles.
El estudio ‘Bienestar y trabajo desde casa 22’, realizado por Statista Q para NFON revela el impacto que ha tenido la pandemia en el teletrabajo. En este sentido, el 28% de los encuestados en los países europeos afirma que la cantidad de trabajo que hay que hacer (carga de trabajo) ha aumentado, y para el 25,2% las horas de trabajo también. Al mismo tiempo, el 36% afirma que ha alcanzado un mejor equilibrio entre la vida laboral y la personal y más tiempo para la familia y los amigos.
Esto es lo que Christian Montag, catedrático de Psicología Molecular, autor de libros y experto en la influencia de las tecnologías digitales en la psicología humana y líder del estudio, llama la paradoja del trabajo desde casa: «La gente puede trabajar más y tener más tiempo libre. La eliminación de los largos desplazamientos y, en general, un horario más flexible a lo largo del día puede hacer que, si la organización es buena, se disponga de más tiempo. Los horarios de trabajo personalizados, la alfabetización digital y otros factores de bienestar también pueden ser la causa«. Por ejemplo, el 29,4% dice dedicar más tiempo a hacer ejercicio y también a comer de forma más saludable.
El estrés tiene muchas causas, y el estudio europeotrata de establecer un mapa con una selección de factores de estrés. Entre los participantes, el 37% declaró sentirse estresado en diversos grados. Entre otros, se mencionaron como factores de estrés a comer en casa (8,7%), una mala conexión a Internet (17,2%) y la constante accesibilidad (19,7%). Por otro lado, la falta de trato social con los compañeros es un factor de estrés para el 35,3% y la ausencia de separación entre la vida privada y la profesional para el 30,3%. Por el contrario, son menos los que señalan como factores de estrés el ruido ambiental (15,9%) y la mala remuneración (9,3%).
Trabajar desde casa también está cambiando la disposición de optimizar, no solo el propio bienestar y la salud física y mental con suplementos sin receta, sino también de aumentar la capacidad de concentración y promover la relajación. Está surgiendo una tendencia a la automedicación entre la población europea que trabaja desde casa. El 34,4% de los encuestados asegura haber tomado suplementos sin receta para mejorar su bienestar desde el comienzo de la pandemia, el 18,2% para aumentar la concentración y el 13,4% para recuperarse.
El teletrabajo trae consigo nuevas afecciones y retos
Con el fin de profundizar en el bienestar de los encuestados, también se les preguntó por el lugar en el que realizan el teletrabajo. Según la encuesta, el 12,1% ha trasladado su espacio de trabajo al dormitorio, el 31,8% tiene un despacho privado y el 35,7% trabaja desde el salón. En los ocho países, el espacio medio para trabajar desde casa es de 20,32 m². El 1,2% de los participantes declara que trabaja permanentemente en el aseo, el baño, o en el balcón.
Los resultados del Informe Bienestar y trabajo desde casa 22’ son preocupantes de cara al futuro y deberían constituir una señal de alarma para los empresarios europeos: el 21,7% de los encuestados afirma que ya ha planeado su dimisión por las experiencias vividas durante la pandemia y al trabajo desde casa, y el 9,9% ya ha dejado su trabajo. Algunas de las razones por las que se ha abandonado el trabajo son, por ejemplo, la falta de oportunidades para realizarse profesionalmente (34,2%), una peor remuneración (por ejemplo, la jornada reducida o la pérdida de comisiones, 30,1%) y la accesibilidad permanente (16,6%).