En los próximos dos años el Edge Computing crecerá un 37% en el 75% de las empresas, según estimaciones de IDC. Así, la computación distribuida en cualquier parte será una apuesta por las organizaciones que priorizarán la modernización de infraestructuras ya existentes o heredadas, en vez de afrontar la construcción de nuevas infraestructuras.
El aumento del gasto en Edge Computing está impulsado por factores clave, entre los que destacan los requisitos de rendimiento de las cargas de trabajo en expansión y los nuevos casos de uso, que aprovechan la inteligencia artificial (AI) y el aprendizaje automático (ML), y que exigen una mayor capacidad de la computación en el extremo (edge).
También influye en el aumento de la inversión el rápido crecimiento de la cantidad de datos que se almacenan en estas ubicaciones, y la necesidad de las empresas y organizaciones de mantener estos datos durante más tiempo, por lo que está aumentando el número de servidores físicos que se están desplegando.
Las empresas que apuestan por este tipo de infraestructura se centran en la construcción de negocios escalables, con inversiones que pueden contribuir rápidamente a la cuenta de resultados. Así, el aumento de los ingresos, la mejora de los productos y servicios y la reducción de los costes son los principales objetivos en los despliegues de Edge Computing.
El Edge Computing se puede abordar desde diferentes perspectivas y con ello, se puede desplegar desde diferentes aproximaciones y ámbitos. Unas soluciones que además de una inversión para las organizaciones, supone una oportunidad para el canal de distribución, como ya hemos comentado en otras ocasiones.
Dave McCarthy, Research Vicepresident, Cloud and Edge Infrastructure Services de IDC ha explicado que:
«Las empresas señalan que quieren los beneficios de un modelo operativo en la nube, con la libertad de desplegarlo en cualquier lugar. Esto crea enormes oportunidades para los proveedores de tecnología, que pueden reducir la complejidad y mantener la coherencia en estos entornos distribuidos».
En este punto es clave que los proveedores de servicios revisen su cartera de servicios y soluciones en infraestructura y lo acoplen al mundo Edge Computing. Una forma de ofrecer a los negocios más escalabilidad, flexibilidad y acoplamiento a sus necesidades para ayudarles a crecer.
También los proveedores deberan identificar los sectores y casos de uso que probablemente sean los primeros en adoptar Edge Computing, como el sanitario y el de fabricación ya que procesan un alto nivel de datos dispersos.