Un reciente estudio pone de manifiesto que controlar los costes es el principal reto que apuntan los usuarios de la nube. A esto también se le unen otros aspectos que preocupan a los usuarios como la privacidad de los datos o los nuevos desafíos en ciberseguridad.
El crecimiento de la nube está conllevando importantes retos que los usuarios deben afrontar. De media, las empresas planean destinar un 32% de su presupuesto en TI a la nube, es decir, unos 78 millones de dólares, a lo largo de los próximos doce meses. Una cantidad que sigue creciendo ya que supondrá casi un 7% más respecto a los 73 millones de dólares que se invirtió el pasado año.
Así se desprende de una reciente encuesta realizada por Foundry a 850 responsables de la toma de decisiones, en la que el 36% apunta que controlar los costes es su principal desafío.
Y es que, si bien cada vez más el cloud computing se ha convertido en un elemento básico de las infraestructuras de TI para los que buscan beneficiarse de sus posibilidades, especialmente a la hora de mejorar sus operaciones, los problemas con la gestión de costes iniciales es un desafío imperante.
Una mala planificación se vislumbra como una de sus razones. En opinión de Sid Nag, vicepresidente de investigación de Gartner, a menudo, los responsables de negocio trasladan las aplicaciones de sus organizaciones fuera de los servidores físicos antes de que están correctamente codificadas para ejecutarse en la nube.
Y esto es un aspecto realmente crucial teniendo en cuenta que la mayoría de las empresas tiene un equipo de nube central o un centro de excelencia en la nube o, como apunta el informe “2022 State of the cloud” de Flexera, un grupo de empleados encargados de guiar la estrategia de la nube de toda la empresa.
No obstante, las estrategias descentralizadas de TI y multicloud plantean nuevos desafíos en lo que a costes se refiere ya que las empresas aún necesitan profundizar más en cómo los distintos departamentos hacen uso de la nube.
Por eso los expertos apuntan la importancia de establecer una estructura de supervisión y gobernanza y, en un entono multicloud, es clave que las organizaciones conozcan los recursos que tienen disponibles para optimizar sus costes.
Y es aquí donde el software y la gestión mejorada de proveedores pueden ayudar a las empresas a reducir este desaprovechamiento de la nube.
En opinión de Sid Nag, el modelo multicloud es una buena estrategia que ofrece la posibilidad de seleccionar las capacidades más rentables de acuerdo a las necesidades de cada organización, lo que contribuye a reducir los costes innecesarios.
“Un proveedor de nube puede ser más barato que otros, y aunque el coste no siempre es la razón por la que las personas recurren a múltiples nubes, es una ventaja potencial.”
En este sentido, más de la mitad de los responsables de TI encuestados que ejecutan una arquitectura multinube apuntan que ya están viendo los beneficios de una mayor flexibilidad de la plataforma y el servicio. Asimismo, cuatro de cada diez están logrando consiguiendo ahorros de costes y mejoras.
Sin duda, aspectos clave a sacar el máximo beneficio de la nube y sin incurrir en gastos que bien pueden ahorrarse.
Imagen inicial | Andreas Kind