Entre los principales incidentes de las empresas en materia de ciberseguridad se cuelan las brechas de seguridad de los datos. Junto con los ciberataques y el ransomware, la protección del dato se sitúa entre los desafíos más importantes. Y es que como eje central para muchas organizaciones, la información se ha convertido en oro digital de los cibercriminales y en el objetivo a escudar para los partners especializados.
El clima de amenazas empresariales crece sin parar por todos los frentes. En este panorama cada día vemos nuevas variantes y fórmulas para llegar a penetrar en la infraestructura IT de las empresas. Por tanto, no suena extraño ver que el año pasado se encontraran 5.100 millones de brechas de seguridad, un 11% más que el anterior. Y eso solo contabilizando aquellas que se han detectado.
Las empresas son conscientes de esta realidad y se nota en sus presupuestos. Según un estudio de Accenture, el 83% de las organizaciones ha aumentado su partida de ciberseguridad. Una tendencia que previsiblemente irá a más en los próximos años vista la oleada de ataques y el auge de los entornos digitales. Un ambiente donde la información será el activo más importante de las empresas para ser competitivas y triunfar.
Sin embargo, el reto es aún mayor si sabemos que no todas las partidas de ciberseguridad están gestionadas de la manera correcta ni todas las empresas entienden la importancia de la protección del dato. Y es ahí donde entra en juego los partners especializados.
GDPR, un impulso para la protección del dato
Con la entrada en vigor pleno de la normativa europea de protección del dato, conocida como GDPR, en 2018 se dio un paso de gigante en el entorno de la protección del dato. Este reglamento buscaba la protección de la información más personal, pero a la vez promover políticas de transparencia y privacidad en las organización que impidieran exponer sus datos a los cibercriminales. Un impulso para que las empresas actualizarán sus estructuras de almacenamiento y gestión de la información.
Aún así, los retos continúan sobre la mesa. En 2021 se aplicaron 430 multas relacionadas con la violación de la GDPR, materializado en más de un billón de euros (1.000 millones de millones). Un dato que, comparado con las 306 de 2020 que supusieron 182 millones de euros. Con ello se demuestra el trabajo en beneficio de los usuarios y su información que se está haciendo.
En este sentido, la Agencia Española de Protección de Datos, que ya contaba con una regulación previa bastante similar a la europea, fue una de las más activas en el control; en 2021 impusó 176 multas, obligando así a impulsar la protección del dato como un punto más dentro de la estrategia de ciberseguridad empresarial.
Abordaje local con mirada global
Pero pensar en cumplir la GDPR no puede ser el único abordaje para la protección del dato empresarial. Este tan solo puede ser un punto de partida para aproximarse a un cliente o comenzar a entender la importancia de la gestión de la información en una estrategia de ciberseguridad. Por tanto, es necesaria una mirada mucho más global para atajar un problema más local.
A la hora de entender una estrategia de ciberseguridad donde se integre la protección del dato es fundamental atacar diferentes frentes. Debemos pensar en cómo proteger la infraestructura IT donde se almacenan los datos, cómo mover esa información con las máximas garantías o en qué lugar o qué copias tendremos para que, en caso de una amenaza, esté todo bajo control. Muchos flancos en los que pensar.
Entre los pasos que se deben tener en cuenta para conseguir una estrategia efectiva de ciberseguridad se encuentran:
- Auditoria inicial: el primer paso para saber qué proteger y cómo, es conocer el estado de la empresa en esta materia. Conocer su grado de madurez digital y de protección fundamental para entender el abordaje a seguir.
- Detección de brechas: con esa auditoria inicial se pueden detectar ya posibles brechas y puntos débiles que serán prioritarios.
- Definición de la estrategia: momento crucial donde debemos tener en cuenta todas las casuísticas de la organización, sus procedimientos y sus necesidades. En base a ello se creará una estrategia para abordar todos los siguientes puntos.
- Normativa y políticas: es hora de pensar en la tecnología y procesos a aplicar para securizar la organización, ajustándonos a toda la reglamentación actual.
- Protección: es hora de pensar en cómo aplicar la tecnología. Definir qué proteger y cómo. Dispositivos, sistemas, herramientas y servidoresson los principales focos. No obstante, será un tema a analizar en profundidad ya que no se puede abordar de la misma forma en todos los casos.
- Copias de seguridad: una vez que sepamos cómo vamos a proteger los recursos, debemos pensar en qué pasará si la información es atacada. Aquí, el backup se vuelve fundamental.
- Monitorización: controlar qué pasa en la organización y qué movimientos pueden ser sospechosos o de riesgo será el siguiente estadio.
- Respuesta ante incidentes: el momento más delicado y crucial. Saber qué medidas tomar y cómo afrontar una amenaza para intentar que afecte lo mínimo posible.
En todos estos pasos es crucial pensar en la tecnología, pero, sobre todo, en las personas. Y es que gran parte de las amenazas que afectan a los datos de una empresa son dadas por una acción humana. Por ello, es fundamental la formación y asesoramiento para que esto no ocurra y los datos no se vean desprotegidos por un mal clic o un envío de archivos a la persona incorrecta.
Pero las personas no solo pueden suponer un riesgo en las empresas, sino un activo de valor. De hecho, son los profesionales dentro de los partners especializados los que permiten que esta estrategia de ciberseguridad sea efectiva y resolutiva.
Ciberseguridad como servicio
Los partners especializados se tornan así en una pieza fundamental para definir, planificar, ejecutar y monitorizar una estrategia de ciberseguridad. Un plano donde cada vez es más fundamental pensar no solo en la tecnología sino en el servicio que ofrecen estas figuras a las empresas. Nace así la ciberseguridad como servicio.
El reto de la protección del dato va intimamente ligado a una propuesta de ciberseguridad as a Service. Y es que los servicios son una pata fundamental para conseguir que una estrategia sea efectiva y ágil. No en vano, son los servicios gestionados de seguridad una demanda en alza por todo tipo de empresas que necesitan asesoramiento y acompañamiento para lidiar con los retos de ciberseguridad diarios.
Un punto por el cual son los MSP especializados en protección los más codiciados por fabricantes y clientes finales. Unos partners que, si bien todavía no son los más frecuentes, son los que más aumentan su negocio debido a la gran demanda de servicios gestionados de la que hablamos. Es por ello, además, que aquellos proveedores más maduros en este terreno están mejorando su oferta de servicios para llegar aún más lejos.
Si eres un partner con ganas de dar el salto hacia la ciberseguridad como servicio, aprovechando el tirón del dato o quieres saber cómo hacer negocio con la protección del dato, te invitamos a ver nuestro webinar el próximo, martes, 29 de marzo a las 10 de la mañana. ¡No te lo pierdas!