El inicio de la era enfocada a la calidad y no a la cantidad ha comenzado en el Grupo Esprinet. El mayorista que ya advirtió de esta tendencia y, es parte de su plan estratégico para los próximos años, ha presentado el balance anual de 2021. Un año en el que los ingresos en España crecieron tan solo un 1% hasta situarse en los 1.686 millones de euros. Así, nuestro territorio se sitúo como el país donde opera la compañía con menor crecimiento, pese a la contribución de 153,6 millones de euros de GTI y Diode.
En total, el grupo empresarial alcanzó unas ventas de casi 4.700 millones de euros, un 4% más que en 2020. Además de Italia donde creció un 5% con unas ventas de 2.854 millones de euros, el mayorista obtuvo una subida del 59% en Portugal donde superó los 100 millones de euros ingresados. Y es que el país luso que en el cómputo total representa el menos importante, está teniendo una trayectoria muy buena en todo lo tecnológico.
No obstante, en los resultados del Grupo el punto más destacado son, sin duda, los beneficios. La organización apuntaló el compromiso de tener un 2021 más rentable con un beneficio neto de 44,1 millones de euros en 2021, un 39% más que en el ejercicio anterior. El EBITDA ya ajustado se situó en 86,1 millones de euros, un 25% más.
El camino emprendido hacia el valor en un mayorista tradicionalmente de volumen no es sencillo. Sin embargo, desde el Grupo Esprinet desde hace tiempo se van viendo los frutos que se han ido sembrando no solo con las adquisiciones en España de otros como GTI, Diode o Vinzeo, sino también en el propio avance natural de sus números.
Aunque la nota oficial no desglosa los resultados en cada país, si que muestra un comportamiento positivo en el área de valor. De hecho, en el segmento de Advanced Solutions, su unidad de tecnología de valor, las ventas fueron superiores a 870 millones de euros en 2021, consiguiendo un aumento del 46% con respecto al ejercicio anterior.
Especialmente notable también es el volumen de negocio de los partners que ya están situados en la parte profesional. De estos el pasado año se generó un negocio de 2.648 millones de euros, con un incremento del 12%, que ya supera lo ingresado por los distribuidores de consumo (2.190 millones de euros).
Aún así, el volumen sigue siendo la principal vía de ingresos del grupo con especial indicencia en nichos como los ordenadores, que generaron 1.640 millones de euros, los smartphones con 1.254 millones de euros. Sin embargo, estos dos ámbitos descendieron sus cifras mientras la electrónica de consumo, donde engloba el hardware, software y servicios cloud, subió un 2% hasta alcanzar los 1.560 millones de euros. Destacable también la subida de la gama blanca y videojuegos de un 27% cada una.
Los resultados avalan la estrategia del Grupo pero además dan alas para mirar a un futuro con optimismo y con cautela al mismo tiempo. Los fondos europeos, la contención del gasto en consumo en estos dos últimos años que dará paso a más inversión o los nuevos cambios de modelos son signos positivos, que se empañan con la Guerra de Ucrania y todavía los coletazos de la crisis del Covid-19.
Tanto es así que el mayorista retrasa su pronóstico para este 2022 al mes de mayo cuando considera que será más sencillo dar una previsión. Esperemos que así sea debido a una situación macroeconómica más estable.
Por lo pronto, el Grupo se remite a los analistas para dar una pequeña visión de lo que pasará este 2022. En el área de consumo se espera que el segmento sea menos boyante en la primera parte del año, antes de repuntar a finales de la primavera, cuando el impacto de las subidas de la energía debería disminuir y la inflación ralentizarse.
Por otro lado, se espera que la demanda del segmento empresarial sea en general más boyante, con una mayor aceleración en el transcurso del año a medida que se pongan en marcha los proyectos de la administración pública financiados por NextGenEU.