Si hay algo que parece evidente en toda la industria TI es que el cloud, en sus diferentes modalidades, es el sendero por el que andar. Pero no es solo un mensaje que repiten incansablemente todas las referencias tecnológicas sino también una realidad que se transforma en negocio. Prueba de ello, los resultados que han ido ofreciendo en los últimos días las grandes referencias de este segmento: AWS, Alphabet y Microsoft.
Los tres grandes hiperescaladores que manejan las cuerdas de la infraestructura y servicios en la nube tuvieron resultados impresionantes gracias al cloud. En el caso de Amazon Web Services, el último en presentar resultados, incrementó sus ventas un 40% hasta los 17.780 millones de dólares en un solo trimestre. En términos totales, Amazon dobló beneficios en este período gracias, en gran parte, a este buen comportamiento de la división cloud que eclipsó comportamiento casi plano (+1%) que tuvieron las ventas en su tienda online.
Microsoft también tiene mucho que agradecer al entorno cloud y la estrategia que Satya Nadella comenzó hace ya unos años. En sus últimos datos fiscales, la corporación superó los 50.000 millones de dólares por primera vez en un trimestre. De estos, 18.300 millones de dólares provenieron de la división Cloud Inteligente. Azure mejoró su comportamiento un 46%, un incremento menor que en otros trimestres, pero aún así muy significativo que se une a las subidas en las unidades de software que tienen una tendencia clara al SaaS. Office 365, por ejemplo, aumentó sus ingresos un 19%.
Por su parte, Alphabet, matriz de Google, incrementó su negocio cloud un 45% en el último trimestre alcanzando los 5.541 millones de dólares. Un montante que se queda bastante detrás del de sus competidores, pero que aún así representa algo más del 7% de su facturación que fue de 75.330 millones de dólares en este período.
Pero el cloud no se queda en AWS, Microsoft y Alphabet. Basta ver como el mercado cloud en Europa crece a un ritmo del 25%. Y ese crecimiento también tiene mucho que ver con otros proveedores que están aupando esta tendencia ya imparable.
La variedad de sabores que se puede «degustar» en este negocio es casi infinita. Desde la infraestructura, que podríamos decir que es la vertiente quizás más clásica, hasta el SaaS pasando por la gestión de herramientas en la nube o la monitorización remota. El abanico de opciones se abre y se entremezcla creando «platos» para todos los gustos que las empresas cada vez acogen con más naturalidad.
Las oportunidades que ha abierto el cloud no tiene muchas referencias. Ya no es solo un mensaje de marketing de los fabricantes, sino un negocio vibrante para el canal TI. No en vano, muchos partners están nutriendo su oferta en la nube. Otros directamente han nacido al calor de esta tendencia y se están haciendo un hueco clave.
Aunque el camino cloud parezca el mismo para todos, el nivel de senderos alternativos es muy variado. De hecho, ninguna empresa ni partner comienza su andadura desde el mismo punto inicial ni tiene la capacidad de llegar al mismo destino. La madurez en este segmento todavía es algo limitada, pero comienza a ser bastante más habitual ver interés por esta modalidad de negocio.
Sin embargo, no podemos olvidar que para muchos de los más de 10.000 partners que integran el ecosistema tecnológico en España, la nube todavía es algo residual o que incluso, no entra en su modelo de negocio. Aún así, hemos avanzado mucho en los últimos años y parece que el mensaje que repiten una y otra vez fabricantes y mayoristas va calando a la par que se mejoran los recursos y las opciones de soporte.
Queda mucho por hacer y las oportunidades todavía son muchas, pero el camino ya está marcado. Tan solo hace falta, como decía la máxima responsable de Also Cloud España, «probar sin canibalizar con el negocio tradicional. ¿Estás en ello?