Ante el impacto que sigue teniendo la pandemia de la COVID-19 en la economía global, el mercado de semiconductores sigue experimentando una escasez que lleva a una oferta limitada. No obstante, las inversiones en nuevos procesos de fabricación y el empuje de fabricantes en la región de Asia Pacífico contribuirán a su recuperación.
De acuerdo con las previsiones de IDC, los problemas de escasez en el mercado de semiconductores seguirán a lo largo de la primera mitad de 2022 y la industria irá volviendo poco a poco a sus niveles de inventario normales.
Y es que la evolución de la pandemia ante el aumento de los contagios por la nueva variante Ómicron, ha vuelto a ralentizar la producción y ahora preocupa la falta de mano de obra ante las bajas laborales que se están produciendo a nivel mundial.
El mercado de la automoción, uno de los más afectados por la escasez de semiconductores, sigue en un momento delicado limitando la fabricación de automóviles. Esto ha llevado a los OEM a tener que utilizar su suministro de semiconductores para los vehículos de mayor valor, lo que ha elevado su precio medio de venta.
De acuerdo con las previsiones de la consultora, los semiconductores para este sector seguirán experimentando esta escasez a lo largo del primer semestre de este año, si bien, salvo cierres imprevistos o problemas de fabricación, el suministro debería mejorar gradualmente durante la segunda mitad del año.
Una de las limitaciones del mercado de semiconductores radica en los nodos de antiguos procesos. Los fabricados para el sector automovilístico, que dependen en gran medida de estos procesos más antiguos, pero también muchos otros semiconductores se fabrican con estas tecnologías de procesos de fabricación a 40 nanómetros, como los controladores LCD, circuitos integrados para la gestión de energía, circuitos integrados automáticos y microcontroladores.
Según IDC, el 67 % de los semiconductores se fabricaron siguiendo estos procesos en 2021. Utilizando activos en gran parte depreciados, estos semiconductores se venden a un precio medio más bajo en comparación con los nodos de procesos de vanguardia, de 16 nanómetros o menos. Para la consultora, si bien la fabricación de vanguardia solo representa el 15 % del volumen de obleas de semiconductores, los ingresos de estos semiconductores representan el 44 % del total. Esta diferencia explica el enfoque del gasto de capital en la vanguardia del mercado de la fundición y la inversión limitada en la fabricación con tecnologías de procesos más madura.
Asimismo, la firma también apunta un crecimiento continuo de los ingresos por semiconductores sin fábrica y el crecimiento continuo de la capacidad de fundición en Asia Pacífico. La previsión es que los ingresos de semiconductores sin fábrica experimenten un crecimiento que pase de una cuota de mercado del 41 % en 2020 a un 49 % en 2025.
La inversión en fábricas de semiconductores no verá resultados este año
La capacidad de producción seguirá creciendo en Asia Pacífico. Los pronósticos apuntan a que, en 2025, Corea del Sur y China aumentarán su participación en la fabricación de obleas al 19 % y al 15 %, creciendo desde el 16 % y el 12 %, respectivamente.
A pesar del crecimiento de la capacidad en estos países, la participación en los ingresos seguirá siendo estable en Taiwán, que representará el 68 % de la producción en 2025, un poco más del 67 % en 2020, en gran parte debido a la inversión y el éxito de TSMC, entre otros proveedores.
Las previsiones para el mercado general de la fundición apuntan que crecerá a una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) de cinco años del 12% entre 2020 y 2025.
Si bien las nuevas fábricas y los anuncios de inversión son una buena señal para la capacidad de fabricación de semiconductores durante los próximos cinco años, los resultados no se percibirán en 2022. Las empresas están incorporando lentamente más capacidad, pero la mejora de la capacidad será incremental este año y se acelerará en 2023 y, presumiblemente, los años siguientes.
Imagen inicial | Chris Ried