Ante la necesidad de acelerar la disponibilidad de aplicaciones, apostar por el ‘low code’ en un momento en el que escasean los profesionales con habilidades TI se ha convertido en una apuesta clave para dar respuesta a las nuevas necesidades de las organizaciones. Desarrollar una estrategia adecuada de integración será clave para su adopción.
Ante la falta de profesionales con habilidades TI que actualmente existe en todo el mundo, las empresas se enfrentan a unas pérdidas de 390.000 millones anuales hasta 2025 ante la incapacidad de dar respuesta al desarrollo de aplicaciones que se requieren de forma urgente.
Frente a este panorama, el ‘low code’ o ‘no code’, se erige como una de las soluciones clave para abordar esta brecha y la consiguiente acumulación de proyectos que las organizaciones no pueden llevar adelante. Y todo esto en un momento en el que la apuesta por la tecnología a raíz de la pandemia de la COVID-19 para garantizar la continuidad de millones de negocios en todo el mundo, está pasando por un momento crucial.
Las plataformas ‘low code’ / ‘no code’ tienen el potencial de transformar la forma en que se crean las aplicaciones, lo que permite a las personas más cercanas a los clientes y usuarios comerciales ofrecer soluciones y experiencias, todo con una participación mínima de la organización tecnológica.
De esta forma, personas que no forman parte del equipo de TI de la organización, pero sí con profundos conocimientos del funcionamiento del negocio y de los distintos requerimientos, se encargan del desarrollo de aplicaciones que ayudan enormemente a seguir avanzando en la empresa ofreciendo las soluciones idóneas.
Ante la carencia de habilidades TI, la adopción de ‘low code’ es una oportunidad
Ante la carencia de habilidades TI para cubrir estas necesidades, los responsables de TI de todo el mundo están entusiasmados con la oportunidad que conlleva la adopción de estas plataformas de ‘low code’. Sin duda, esto les permite incrementar su agilidad y reducir el tiempo para aportar valor, al tiempo que cierra la brecha de habilidades y disminuye la tensión en TI.
No obstante, casi una cuarta parte de los CIO todavía muestra su temor a la ‘shadow IT’, o tecnología en la sombra, es decir, aquellos sistemas de TI que se instalan sin contar con el departamento TI, sobre todo por las consecuencias que puede conllevar a la hora de poner en riesgo la seguridad y la calidad de sus soluciones.
Dado que muchas empresas todavía luchan por adoptar Agile y DevOps para acelerar los ciclos de vida del desarrollo de software, el ‘low code’ ofrece un ritmo de entrega que es significativamente más rápido que cualquier otro visto antes.
Nuevos modelos operativos para impulsar el ‘low-code’
A pesar de que muchas empresas ya están disfrutando de las ventajas de su apuesta por el ‘low code’, para aprovechar al máximo sus beneficios, es fundamental que los CIO adopten nuevos modelos operativos que coincidan con el potencial de la tecnología. Estos modelos operativos deben equilibrar las necesidades de innovación, estabilización y escalado, para el negocio y la tecnología.
De esta forma, tanto los responsables de TI como las organizaciones deben convertirse en los habilitadores de la innovación y el cambio empresarial. En este nuevo entorno, cada empresa y su equipo de tecnología pueden tener cuatro modelos operativos distintos.
El primer modelo es aquel en el que los desarrolladores, profesionales no TI, abordan la experiencia del cliente mientras forman parte de los equipos de productos.
El segundo modelo contempla mejoras en la productividad de los usuarios empresariales entregadas por equipos dirigidos por desarrolladores ciudadanos. Por su parte, en el tercer modelo, los controles y servicios empresariales están proporcionados por equipos de código profesional y habilitadores de innovación, dirigidos por la organización de TI.
Esa categorización puede ayudar a determinar las composiciones de equipos más adecuadas para las distintas entregas, por ejemplo, buscando la combinación perfecta entre los desarrolladores no profesionales (‘low code’) recientemente y los desarrolladores de código profesional para integrarlos en la organización TI.
Es necesario crear nuevos modelos de participación
Esto también pone de manifiesto la necesidad de crear nuevos modelos de participación que permitan una colaboración óptima entre los CISO y los directores de datos para la seguridad y la gobernanza de datos, así como la nueva generación de usuarios empresariales expertos en tecnología en la primera línea para comprender y satisfacer cada vez más las necesidades de los clientes.
A medida que avanzamos hacia un mundo donde las fronteras entre negocio y TI se están desvaneciendo rápidamente, existe una gran oportunidad para que los CIO con visión de futuro reconsideren cómo trabajan y lideran sus organizaciones. El ‘low code’ no solo es un elemento clave para lograr una mayor productividad, también es la forma de llegar más rápido.
Para conseguirlo es crucial, además de implementar nuevos modelos operativos, segmentar y racionalizar la cartera de tecnología para adaptarse al nuevo modelo, asignar fondos para impulsar la innovación habilitada por el ‘low code’, e impulsar la creación de opciones conjuntas y simplificar los esfuerzos para abordar los problemas de seguridad.
Con el tiempo, estos modelos operativos deberán evolucionar para equilibrar la combinación de desarrolladores de código profesional y ‘low code’, mientras que los responsables de TI colaboran con los proveedores de plataformas para impulsar su madurez.
Imagen inicial | Charles Deluvio