No todo son parabienes para el cloud y hay aspectos a solventar en las empresas por parte de los partners. Los requisitos regulatorios (21 por ciento) y los costes (19 por ciento) son los principales desafíos entre las organizaciones que actualmente no utilizan la computación en la nube.
«Es un error común pensar que la computación en la nube es económica, lo cual simplemente no es una realidad a escala corporativa», explica Mike Loukides, vicepresidente de contenido de O’Reilly. «No debería ser un obstáculo para la adopción cuando se sopesa el coste de migrar cargas de trabajo a la nube frente a posibles cortes e interrupciones del servicio en sistemas locales tradicionales que no pueden manejar una carga pesada o picos de tráfico. Esto se convertirá en especialmente evidente para la industria minorista a medida que nos acercamos a la temporada de compras navideñas», aclaran.
Si bien podría esperarse un mayor impulso por la pandemia de COVID, el crecimiento ha sido constante los últimos años. De media, el 90% de los encuestados dice que sus organizaciones utilizan la computación en la nube, en comparación con el 88 por ciento del año pasado. Aunque es solo un pequeño aumento, casi la mitad (48 por ciento) dice que planea migrar el 50 por ciento o más de sus aplicaciones a la nube el próximo año.
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