Los avances que se han ido introduciendo en la tecnología de almacenes han sido muchos en los últimos años. Desde los sistemas cloud para la gestión hasta el IoT o la Inteligencia Artificial. Sin embargo, todavía hay unos básicos tecnológicos que no siempre se cumplen.
Dentro de un almacen es necesario cierto orden y optimización para conseguir que todo fluya correctamente. Para conseguir ese objetivo la tecnología en almacenes es un apoyo fundamental que ayuda a mejorar procesos, eficienciar la gestión y, en definitiva, hacer que este espacio se convierta en un punto diferenciador del negocio.
Y es que podemos tener mucho inventario en nuestro almacen guardado en las mejores condiciones, pero si no sabemos dónde está o cómo podemos acceder a él, de poco servirá todo el esfuerzo de almacenamiento. Es por ello que hoy os proponemos algunas herramientas de tecnología en almacenes imprescindibles para el funcionamiento actual de estos lugares.
Empezamos por el recurso más básico en una organización: el Enterprise Resource Planning o ERP, es decir, el sistema de planificación de recursos empresariales que se vuelve esencial en un almacen. Este tipo de herramientas suponen un visor para la gestión, planificación y distribución de los productos. Desde este software se controla además de la organización, la facturación, los envíos o la distribución.
Existen muchas opciones en el mercado adaptadas al mundo de los almacenes. Ahí tendremos que ver cuál se adecua más a nuestra idiosincrasia y cuál es el modelo de pago en el que queremos movernos, siendo el pago por uso una de las tendencias más en boga.
Podríamos unirlo al anterior punto, pero creemos que necesita ser un punto más por su importancia. El SGA o software para la gestión de almacenes puede ir embebido en un ERP o ser un sistema complementario. En cualquiera de los casos, es un imprescindible para tener un control exhaustivo de todo lo que pasa en el almacen.
Las funcionalidades de un sistema SGA van desde la gestión del movimiento del inventario hasta la planificación de los flujos logísticos o de transporte. Incluso los más avanzados permiten automatizar el transporte o interconectarse con otros almacenes para gestionar envíos o encargos.
La identificación por radiofrecuencia o RFID es una tecnología madura que lleva mucho tiempo con nosotros. Lo vemos en etiquetas o tarjetas y es un aliado fundamental en cualquier almacen. De hecho, es muy común para identificar los productos y tener un control de sus movimientos.
Junto al RFID es necesario contar con un sistema de administración, normalmente el propio SGA, con el que podamos tener un panel de control en tiempo real.
En este punto hay muchas tecnologías de las que podríamos hablar. Sin embargo, nos centramos en los robots o drones que permiten agilizar la cadena de suministro y los procesos de movimiento de los productos. Un claro ejemplo de ello, y casi cualquier tecnología en almacenes, es Amazon. Su batallón de robots han eficienciado aún más sus espacios logísticos.
Aquí nos podemos encontrar robots de todo tipo: desde los más elementales integrados en elevadores o vehículos autoguiados hasta aquellos más inteligentes que gestionan todo el proceso de forma automática.