Todos sabemos que el tiempo es oro y más aún, en los negocios. Tan importante cómo tener recursos es saber optimizarlos. Una realidad donde se pone de manifiesta la capacidad de administración de tareas y más primordial aún, la habilidad de controlar cuáles se pueden automatizar y cuáles no. Una diferencia esencial que puede marcar la diferencia entre el éxito y fracaso de un proveedor de servicios gestionados (MSP).
Tal como nos explican en el ebook que presentamos, existen diferentes tipos de partners tecnológicos, pero en todos ellos surgen 5 grandes necesidades a la hora de automatizar tareas operativas. Alternativas que pasan por herramientas RMM que permiten seleccionar los elementos repetitivos que realizamos a diario para pasar a realizarlos de forma autonóma sin necesidad de intervención humana, salvo que la necesaria en casos específicos.
Entre las acciones que podemos incluir en la automatización están la reparación automática de software, el parcheado de diferentes herramientas con actualizaciones de seguridad o la realización de copias periódicas. Llevando a estas actividades a la gestión automatizada es más sencillo tener tiempo para administrar incidencias que puedan surgir y encontrar un hueco para aquellos procesos más laboriosos y de valor.
No en vano, la automatización se torna como una de las áreas de mayor proyección tecnológica no solo por los retos que supone su abordaje sino también por los beneficios que aporta a cualquier entidad, mucho más si hablamos de aquellas especializadas en aportar servicios tecnológicos. Tanto es así que consultoras como IDC prevén que la automatización sea una de las líneas básicas de inversión de las empresas españolas. Mirando un poco más allá se espera que en 2022 el 45% de las tareas repetitivas se automatizarán con trabajadores digitales.
La oportunidad en torno a la automatización es un hecho. Los avances en Inteligencia Artificial o Machine Learning asi lo revelan poniendo sobre la mesa grandes retos en la gestión de datos, procesos y aplicaciones. Un punto donde, como MSP, debemos ir por delante.
Y es que pese a que la mayoría de los CIOs europes no están preparados para la automatización de procesos, el reto ejecutarlo con maestría es clave para los MSP. Solo comenzando a ser más eficiente operativamente con la automatización podrán desarrollar más el negocio, crecer con los clientes actuales y ponerse en busca de potenciales que permitan seguir ampliando horizontes.
En definitiva, estamos ante una formulación perfecta para poner foco en lo que de verdad importa: su negocio y el de sus clietnes. Pero además una puesta a punto idónea para expandir aún más la oferta tecnológica y aportar un sentido real a la tecnología. ¿Lo estás haciendo?