De todos es sabido que cualquier proceso de transformación digital tiene efectos positivos en las empresas. No en vano, la digitalización es casi una obligación para todas ellas, pero mucho más en ciertas áreas claves para el negocio. Y la gestión de compras o proveedores es una de ellas.
«Las compañías dedican más del 50% de sus ingresos al gasto de proveedores», explica Rosario Piazza, CEO de Fullstep. Un punto donde la transformación digital es esencial para reducir costes empresariales y hacer que esas inversiones retornen al negocio con la mayor rentabilidad posible.
Concretamente, la firma de la portavoz asegura que se podría ahorrar hasta un 10% mejorando y optimizando los procesos en unidad de compras o proveedores. Tener el proceso digitalizado contribuye en este departamento a que las empresas puedan reducir un 7% las incidencias, un 12% los plazos de entrega y un 34% los costes internos.
La función de compras y gestión de proveedores, un área muy estratégica para las empresas es una de las que más transformación ha experimentado en el último año. Las interrupciones en el suministro por el cierre temporal de las fronteras, a la adaptación a los picos de demanda, cambios en el mix de producción, incrementos en el precio de productos y componentes, o al teletrabajo han sido alguno de los retos a los que se han enfrentado los negocios y más concretamente, la unidad de compras.
“La transformación digital de la función de compras y aprovisionamiento es un camino obligatorio para aquellas compañías que buscan ser competitivas en un mercado global, así como incrementar la eficiencia en la gestión, y más en años complicados como los que nos está tocando vivir, donde se requiere un mayor control y gestión del riesgo”, explica Rosario Piazza.
Imagen | Israel Andrade