La confianza digital de los clientes se ha convertido en una de las grandes prioridades de las organizaciones actuales. El 41% de los consumidores españoles dejaría de usar los servicios de una empresa tras una filtración de datos.
El creciente uso intensivo de las nuevas tecnologías también ha conllevado la cada vez mayor concienciación por arte de los usuarios de la necesaria seguridad y uso correcto de los datos. La confianza digital se abre paso y se convierte en uno de los aspectos clave para los negocios actuales, sin embargo, sigue siendo frágil.
Así lo apunta el Índice de Confianza Digital de Okta, según el cual, tras entrevistar a 1.013 empleados de oficina en nuestro país, el 41% de los consumidores españoles dejaría de hacer uso de los servicios de una empresa después de que se produjera una filtración de datos.
El 74% de los consumidores no compraría ni usaría servicios en una empresa en la que no confíe
Además, un 74% apunta que no utilizaría servicios o compraría productos de una empresa en la que no confíe.
Según el estudio, ante el creciente uso de herramientas digitales impulsado por la pandemia, cada vez más los usuarios con conscientes de la importancia de la buena gestión y protección de los datos digitales. Esto ha llevado a que el 46% de los españoles encuestados en este estudio se muestren más precavidos sobre lo que comparten en entornos digitales.
Sin embargo, aún queda mucho camino por recorrer, especialmente en el segmento de los consumidores más jóvenes, entre 18 y 24 años, que tienen una mayor tolerancia a una mala gestión de los datos y a la seguridad de las marcas con las que trabajan.
Pero, ¿dónde radica la confianza? Alrededor del 39% de los encuestados en todo el mundo apunta a la fiabilidad del servicio como el criterio que más les lleva a confiar en una marca digital. Pero la seguridad también es clave, y un 25% de los encuestados señala que ver que las empresas disponen de opciones de acceso seguro como la autenticación multifactorial (MFA) y otras opciones, incrementa su confianza.
Esta necesidad de seguridad fue aún más evidente para los encuestados en Australia (24%), los EE.UU. (23%), Alemania (22%) y Países Bajos (22%), mientras que España la percepción es menor (17%).
Tal y como sostiene Juan R. Per, Channel Sales Manager para Italia y España de Okta, estos datos constatan la importancia creciente de la confianza digital, por lo que las organizaciones deben prestar atención a la fiabilidad del servicio y la seguridad óptima que requieren los consumidores.
Una vez que se han ganado esa confianza, las marcas no deben dudar de que deben trabajar duro para conservarla, y que una ciberseguridad eficaz es clave para lograrlo.
El camino ha comenzado pero aún un 14% de los encuestados en España manifiestan que no confían en ningún canal digital para manejar sus datos de forma segura, una cifra muy por debajo de la de otros países como Alemania, que se sitúa en un 23%; o Estados Unidos, que está en un 19%.
El uso de aplicaciones y tecnologías de seguridad como la autenticación multifactorial, o la formación del personal se han erigido como las medidas que, por ahora, más utilizan las organizaciones para apostar por la seguridad en aras a inspirar una mayor confianza.
Imagen inicial | Dan Nelson