Los clientes cada día piden más, pensarán muchos partners. Y es que cada vez necesitan hacer más con menos y para ello, cualquier tecnología que permita automatizar procesos es un aliado. Algunos expertos van más allá incluso afirmando que si no automatizamos todo lo que podemos, no sobreviviremos. Una concepción que puede parecer extremista pero que finalmente nos habla de lo que tenemos delante. El futuro de la automatización.
Hablar de tecnologías de automatización supone mencionar todo y nada. Prácticamente cualquier tecnología empresarial puede tener la capacidad de ayudar al ser humano a procesar determinadas acciones sin su ayuda. Sin embargo, debemos intentar ir un poco más lejos para conseguir que esta automatización sea realmente beneficiosa para los negocios.
En este contexto, hace tiempo que se nombran conceptos como la Inteligencia Artificial o el Machine Learning para poner en práctica una automatización eficiente y avanzada. Terrenos donde casi todos los grandes jugadores del mercado están entrando para aplicarlo a sus soluciones ya que suponen no solo una valor añadido más sino además es la clave de un futuro cada día más cercano. De hecho, la inversión en soluciones IA podría alcanzar los 110.000 millones de dólares en 2024 gracias a este impulso de la industria TI.
La automatización parece que tiene un sentido claro en ciertas industrias. No es difícil pensar en las ventajas que puede suponer la automatización en una cadena de montaje o en un almacen de logística donde los robots puede gestionar más y mejor los pedidos. Sin embargo, estas capacidades pueden ser aplicadas a prácticamente cualquier industria y empresa. El 20% de las empresas consultadas por Forrester piensan, por ejemplo, en automatización de documentos para gestionar emails o contratos, entre otros.
La automatización de los procesos también es un aliado para el control de los negocios. Desde la gestión empresarial propiamente dicha hasta la administración de clientes o la búsqueda de potenciales mercados.
Todo aquello que podamos tener preestablecido permite además mejorar la productividad ya que es un aliciente para que los empleados se dediquen a tareas de más valor como innovar en productos y servicios o encontrar nuevas maneras de fidelizar a los clientes.
Cualquier solución supone solo la base para crear negocio. Finalmente, la automatización es solo una idea que nos sirve de apoyo a toda una estrategia. Un planteamiento con los datos como base donde debemos pensar en aquellos procesos que más tiempo llevan a nuestros clientes y menos rentabilidad ofrecen: recordar la fecha de pago a un cliente, avisar a un proveedor que ya tenemos determinado producto o enviar un mensaje automático a una cliente para atenderle posteriormente son algunas opciones.
Imagen | Daniele Levis Pelusi