Uno de los negocios más tradicionales de la tecnología pero también más competitivos es el del PC. Este mercado de vaivenes continúos y guiado por la estacionalidad, ha vivido unos años complicados en los que los fabricantes han tenido que reinventar los productos para amoldarse a las nuevas necesidades de consumidores y empresas.
Sin embargo, los últimos datos del segmento apuntan a una remontada histórica. En Europa Occidental, por ejemplo, las ventas tuvieron el mayor aumento desde hace 22 años con el portátil como principal aliado para esta subida.
Estos equipos se han transformado en sus décadas de vida y así lo han hecho también las compañías que los vendían. Algunas han sabido adaptarse y otras han preferido volcarse en otros nicho de mayor rentabilidad o donde veían más potencial. En estas últimas nos fijamos en este artículo.
Toshiba ha sido el último fabricante que ha decidido salir del mercado PC. Su decisión, que se conocía desde hace tiempo, no ha restado un nuevo competidor. Esta área ha sido absorbida por Sharp que, bajo el paraguas del conglomerado Foxconn, ha creado la marca Dynabook.
El fabricante que desarrolló y comercializó el primer ordenador portátil del mundo en 1985 cierra una etapa. Ahora se centrará en semiconductores, almacenamiento, energía, infraestructura y soluciones digitales.
Hace ya 7 años, en 2014, que Sony decidió salir del mercado PC vendiendo su división VAIO a un grupo de inversores de su país natal, Japan Industrial Partners, que han seguido comercializando equipos. Un momento en el que Toshiba, paradójicamente, Toshiba aspiraba a llenar el hueco que iba a dejar Sony.
Así, Sony comenzó a centrarse en sus negocios de entretenimiento con la PlayStation a la cabeza y tecnología con smartphones, cámaras y sonido.
Tenemos que ir mucho más atrás en el tiempo, concretamente a 2004, para encontrarnos con la operación de 1.750 millones de dólares por la que IBM vendió a Lenovo su negocio de PC y portátiles. Una operación con la que el gigante azul dejó de ser el fabricante más tradicional en este segmento y el que prácticamente creó la historia de los ordenadores que posteriormente pasaron a ver equipos personales.
Con esta adquisición Lenovo consiguió remontar el vuelo y convertirse en uno de los principales fabricantes del segmento, primera o segunda posición dependiendo el país y época, a nivel mundial.
Aunque la historia TI demuestra una y otra vez que no hay nada escrito, lo cierto es que a día de hoy hay varias cuestiones claras. Por un lado, el negocio PC se ha concentrado en tres marcas principalmente: HP, Lenovo y, un poco por detrás, Dell se llevan la mayor parte de la cuota. Un trío dominante que marca el ritmo del mercado.
Además, el portátil se ha convertido en el modelo más vendido. Tanto consumidores como empresas han descubierto las lindezas de estos equipos que han ido mejorando especificaciones hasta alcanzar unos rangos de uso muy interesantes. Tampoco se puede obviar el potencial de los nichos. El gaming o los trabajos relacionados con el diseño reclaman equipos muy concretos en los que la demanda va en alza.
Todo esto se nota en los datos que, después de unos años complicados a nivel mundial, remontan. Para 2020 se prevé que, pese a la situación de crisis mundial, los envíos crezcan un 3,3%.
Imagen | Pontus Wellgraf