Más allá de algunos bulos y contenidos falsos que circulan el las redes sociales, hemos podido ver como en los últimos días algunos supermercados se enfrentaban al gran aluvión de consumidores que, empujados por el miedo y el desconocimiento ante el coronavirus, se lanzaban a comprar hasta dejar la mayoría de estantes vacíos. Sin embargo, esta histeria parece haber tomado un nuevo camino, habiéndose extendido hasta las compras online.
Y es que durante los últimos días hemos podido ver cómo la enorme demanda de pedidos ha provocado que, no tanto por la falta de víveres sino por la poca cantidad de trabajadores disponibles, muchos de los pedidos se hayan visto retrasados más allá de las propias normas de entrega de las compañías.
Aunque en este caso el mayor cambio ha sido el del supermercado online de Amazon, quien ha pasado de prometer unas entregas a domicilio de productos frescos en un máximo de dos horas, a realizar envíos de uno o varios días, recurriendo incluso a la cancelación de algunos productos frescos ya listados en sus pedidos, e incluso la retirada temporal de algunos de estos en su web. También el envío a domicilio del supermercado de El Corte Inglés está sufriendo unas demoras que los usuarios no se esperaban.
Sin embargo, estos no ha sido los únicos supermercados online que se ha visto sobrepasado por esta situación, siendo los propios comercios dedicados los más afectados. De hecho, algunos supermercados como Mercadono o Carrefour han comenzado a anular ya los repartos a domicilio con plazos de hasta una semana, anunciándolo tanto en los propios establecimientos como a través de mensajes por correo electrónico.
No obstante, las propias cadenas están queriendo difundir este mensaje de tranquilidad, asegurando que no existe ningún riesgo real de desabastecimiento, y que la actual situación se debe tan sólo a la enorme demanda de los consumidores, a los cuales se les pide traten de volver a sus hábitos de compra normales.