El negocio de los dispositivos smart home sigue madurando en Europa, a tenor de los datos de IDC. Solo en el tercer trimestre de 2019 se enviaron 23,8 millones de productos en este segmento de los cuales 4,5 millones fueron altavoces inteligentes. Aunque los altavoces no fueron la categoría más popular, su ritmo de crecimiento les pone a la cabeza de las oportunidades a las que mirar dentro de la casa inteligente.
Con Amazon a la cabeza y seguido muy de cerca de Google, los altavoces inteligentes supusieron el 19% de las ventas del tercer trimestre de 2019, representando una subida del 36,6% respecto a 2018. Las previsiones desvelan que en todo 2019 este tipo de dispositivos alcancen los 22 millones de unidades y casi doblen esa cantidad de cara a 2023 gracias a una subida del 18% interanual.
Sin embargo, será el vídeo entretenimiento la categoría más activa dentro de la smart home. Representando el 56% del segmento en 2019, su crecimiento será más mesurado en 4 años cuando supondrá el 42% del mercado. La maduración mucho más adelantada será la principal causa por la que la subida interanual sea la más baja (+6,6).
Pero será la iluminación el segmento con la aceleración interanual entre 2019 y 2023 más acusada; un 42,6% de subida que hará que se pase de algo más de 6,5 millones de bombillas inteligentes vendidas a casi 27 millones o lo que es o mismo el 14,5% del segmento smart home en Europa. Tampoco es menospreciable la demanda creciente de los dispositivos para el control y seguridad del hogar o los termostatos inteligentes que verán un incremento de su demanda del 17% y 19% en el intervalo 2019-2023, respectivamente.
En el cómputo total para 2023 se espera que la smart home envíe casi 186 millones de dispositivos en Europa desde los 108 millones previstos en 2019. Esto supone un crecimiento anual del 14,5% –superior al pronosticado en anteriores ocasiones– que marca un nicho de oportunidad que nadie discute. No en vano, los fabricantes, con líderes como Amazon, Google o Samsung, están buscando las mejores fórmulas para dotar el hogar de tecnología y otros muchos están entrando en el nicho para aprovechar la oleada. Una evolución donde solo hace falta que los consumidores traduzcan el interés en compras.