Algunas ni se han enterado, otras están en proceso de darse cuenta y otras muchas han descubierto la brecha pero todavía no han puesto medidas para remediarlo. Así se encuentran muchos partners tecnológicos las pequeñas empresas. Un tejido donde el 25% de las mismas sufre una brecha de datos para la que no tienen una fórmula de protección suficiente.
Una encuesta de Kaspersky revela este panorama que lejos de mejorar, crece cada año. Como sus recursos son limitados, normalmente tienen que detener o ralentizar sus procesos de trabajo y arriesgarse a perder beneficios con cada hora o día de inactividad. Si los datos personales de los clientes se ven afectados, la empresa puede perder su confianza y enfrentarse a multas económicas por infringir la normativa, por ejemplo, la RGPD.
El estudio muestra, además, que algunas pequeñas empresas europeas utilizan productos de consumo para proteger sus equipos (20%) y aunque éstos pueden proporcionar un nivel básico de protección, las soluciones para usuarios domésticos no cuentan con las funcionalidades específicas necesarias para la seguridad empresarial.
Para ayudar a las microempresas a gestionar su ciberseguridad, Kaspersky aconseja:
Imagen | Warren Wong