Una de las principales quejas de los responsables de TI de las organizaciones es el bajo presupuesto que se destina a tecnología. Las nuevas exigencias de los nuevos entornos requieren mayores partidas de inversión tecnológica, pero es necesario planificar con precisión cuánto, cómo y dónde destinar los presupuestos de TI.
Según las estimaciones de Gartner, el gasto en TI a nivel mundial crecerá un 1,1% este año. Aunque se trata de un leve crecimiento, es una noticia positiva ya que esto supone un mayor interés por parte de los directivos de las organizaciones en la adquisición de nueva tecnología o renovación de la existente.
Independientemente de si se trata de una tendencia al alza, lo que sí parece es que la inversión en TI se incrementará en unos casos más que en otros. De ahí que los responsables de la toma de decisiones a la hora de invertir en tecnología deban analizar con rigor cómo y dónde destinar el dinero.
En este sentido, destacan cuatro aspectos clave a tener muy en cuenta a la hora de gestionar el presupuesto de TI.
Empoderar a las personas a través de la inclusión digital
Hay que pensar en la tecnología como una oportunidad para todos, sin excluir a nadie. Lo digital puede ayudar a transformar vidas, particularmente para aquellos que están más excluidos. Al enfocarse en la exclusión, la apertura a todos es una gran oportunidad.
Las empresas ven en la inversión en la nube un ROI más tangible a corto plazo
Aprovechar al máximo la nube pública
Como están experimentando muchas organizaciones, el uso de aplicaciones a medida y de la nube ayuda a incrementar su seguridad operativa. Invertir en servicios en la nube se erige como clave para que los negocios optimicen su rendimiento y eficiencia. Especialmente en la nube pública, ya que la tendencia es que la nube privada acabe siendo más de nicho.
Y es que, aunque muchas empresas sopesan invertir en nuevas tecnologías como blockchain o Inteligencia Artificial, destinan parte de sus presupuestos a la nube ya que consideran que supone un retorno de la inversión (ROI) más tangible a corto plazo.
Desarrollar nuevas habilidades
Cada vez más las empresas externalizan o subcontratan gran parte de sus funciones. Esta tendencia parece ser que seguirá en el futuro, lo que permitirá liberar a los recursos internos para funciones más enfocadas a la innovación y el desarrollo. Todo con la mirada puesta en brindar el mejor servicio.
Impulsar el compromiso
La inyección de efectivo a proyectos de TI contribuye, sin duda, a reforzar el compromiso e involucrar al máximo de personas posibles de la organización como parte del cambio, de la mejora.
Imagen inicial | Josh Appel