Como otros sectores tecnológicos, el mercado de la impresión y documentación está experimentando una serie de cambios. La externalización de la gestión y la optimización de los equipos de impresión a proveedores de servicios externos es cada vez más predominante, por lo que es clave tener en cuenta consideraciones para que clientes y proveedores lo hagan con éxito.
Cada vez más, los clientes, especialmente las grandes organizaciones, están reconsiderando su enfoque tradicional en la compra de soluciones de impresión apostando por la externalización de estos servicios.
En 2020, el 20% de las pequeñas empresas adoptarán modelos de pago por uso de impresión
Desde IDC Research España apuntan que, si bien las empresas de menor tamaño pueden no ver las ventajas de contar con la externalización en manos de un proveedor de servicios gestionados de impresión, la mayor parte apostará por modelos de pago por uso. Las estimaciones de la consultora pronostican que, en 2020, el 20% de las pequeñas empresas habrán adoptado contratos de impresión de pago por uso personalizados para la adopción de tecnologías de seguimiento y supervisión de uso remoto.
Esta tendencia hacia el pago por uso podría acelerar la automatización del servicio de hardware de impresión. Esto llevará a que, en 2024, las iniciativas del futuro del trabajo y las tecnologías para acelerar la innovación impulsen la automatización de los servicios de impresión lo que permitirá incrementar la eficiencia en un 25%.
Las previsiones de la consultora apuntan a que los proveedores y distribuidores harán uso de las últimas tecnologías, como Inteligencia Artificial o IoT, para innovar y mejorar la experiencia de cliente. Además, la automatización también contribuirá a reducir los costes de los proveedores e impulsar la eficiencia operativa.
Por su parte, la impresión digital y bajo demanda ofrecerán a las empresas de fabricación un ahorro de costes. IDC prevé que, a finales de este año, el 90% de los propietarios de marcas y fabricantes hagan uso de tecnologías de impresión digital para nuevas eficiencias en la cadena de suministro. Esto permitirá ahorrar más de 3.000 millones de dólares en impresión de paquetes y envases.
Además, IDC prevé que, si bien las empresas seguirán utilizando impresoras y copiadoras para sus necesidades diarias de impresión y copia, la tendencia sigue siendo a un menor uso del papel. La coexistencia entre el papel y lo digital seguirá en los próximos años pero será prioritario equilibrar costes y productividad.
Imagen inicial | Ana Rivarola