El grupo europeo de electrónica de consumo y profesional, LDLC, ha presentado sus resultados económicos para el ejercicio 2018-2019. En este tiempo ha ingresado 507,5 millones de euros de los cuales 162,2 millones de euros provinieron del negocio dirigido a empresas o, lo que es lo mismo, un 18% del total.
Los resultados, un 7,5% superiores a los del ejercicio anterior, vinieron en gran parte de la parte de consumo. Una facturación de 335,9 millones de euros, frente a los 340,1 millones del anterior ejercicio. En este cómputo se incluyen los ingresos derivados de sus primeras tiendas en España. Estos establecimientos aportaron 59,9 millones de euros, es decir, un 18% del total.
En cuanto al margen bruto, se ha mantenido estable durante el año en un 17,0%, destacando un aumento significativo durante el segundo semestre del año, hasta los 2.000 millones de euros o, lo que es lo mismo, un 17,6% de los ingresos, frente al 16,3% del primer semestre de 2018-19. Por su parte, el EBITDA se situó en 2,0 millones de euros.
En un contexto de mercado más favorable, el Grupo tiene la intención de confirmar, entre los años 2019-2020, su objetivo de volver a unos niveles de crecimiento y rentabilidad más acordes con su evolución histórica.
El Grupo LDLC espera beneficiarse de las tendencias más favorables en el ejercicio en curso: inversión de tendencia sobre las actividades de negocio profesional, un mayor crecimiento de la actividad de LDLC.pro y los resultados de sus inversiones.
De hecho, uno de los elementos a destacar de este nuevo ejercicio se centra en el desarrollo de la red de tiendas del Grupo, con un total de 45 comercios en Francia a finales de junio de 2019, y una previsión de llegar a 100 hasta finales de 2020. Todo ello se completa con la intensificación de las actividades en el mercado español.