Hace mucho tiempo que comercio electrónico es la tónica general de muchos negocios de tecnología. Una vía más de explotación que para muchos supone una importante fuente de ingresos. Sin embargo, a medida que la oportunidad se ha ido democratizando más, la competencia se ha hecho más dura. Es por ello que ya no es tiempo solo de vender on-line sino también de mejorar el alcance y condiciones. Bienvenidos al comercio automatizado.
En el entorno del comercio electrónico cada vez se oye con más fuerza el término de a-commerce. Referido al Machine Learning aplicada a las ventas on-line, supone una forma de automatizar los pedidos recurrente y dar una respuesta más ágil y eficiente a los consumidores. Una fórmula que, aunque todavía está por explotar, ya se plantean 2 de cada 10 empresas como implementación a medio plazo, según comenta la agencia Ebolution.
La idea ya la hemos visto implementada, por ejemplo, en la impresión con servicios como Instant ink de HP para reponer consumibles o Amazon Dash, un botón para solicitar productos directamente, este último finalmente un proyecto fallido. Aún así, son dos ideas de lo que se puede conseguir introduciendo Machine Learning y construyendo un comercio automatizado.
El comercio automatizado que plantea el a-commerce supone un paso más en la venta on-line además de ofrecer numerosas ventajas. Destacamos las más importantes:
Introducir herramientas que ayuden a crear un espacio a-commerce no es sencillo ni rápido. No obstante, dotar al negocio de técnicas de Machine Learning aplicadas a la venta puede suponer la diferencia entre coronarse como una referencia o quedarse a la cola entre la marabunta.
El mensaje es claro. Las tiendas on-line deben invertir en innovación, pero siempre construyendo una planificación sobre la que se apoye esa tecnología para que sea efectiva. Un camino de largo recorrido que comienza con iniciativas de suscripción o fidelización que nos ayuden a crear esa base de clientes a la que dar más valor. Un plus que también se debe notar en la atención o en la logística para que el círculo sea perfecto.
Para planificar todos estos pasos, los partners TI se vuelven una figura indispensable como asesores tecnológicos de primera línea.
Imagen | Isaac Benhesed