Un nuevo estudio publicado por CONTEXT confirma que los ingresos combinados que provienen del mercado de servidores, incluyendo tanto equipos como componentes, crecieron en Europa Occidental un 10,4% año sobre año en 2018.
Esto quiere decir que los resultados que registró el mercado de servidores al cierre de 2018 fue muy positivo. Dicho mercado incluye, como anticipamos, tanto los servidores preconfigurados como los componentes clave en dicho sector: memoria RAM, procesadores y unidades de almacenamiento (HDD y SSD).
En el informe se indica que el motor principal de este crecimiento estuvo en dos tendencias muy importantes: la actualización a unidades de almacenamiento SSD y un crecimiento importante de las ventas de memoria RAM. Todo esto hizo, en conjunto, que los ingresos se dispararan frente a los registrados en 2017.
Haciendo un balance general todas las categorías que forman los datos de este estudio registraron un crecimiento interanual sostenido en todos los meses de 2018 salvo diciembre, que se considera como un mes corto en el sector debido al papel que juegan las vacaciones de Navidad.
Mathias Knoefel, Analista Senior de Empresas de CONTEXT, ha comentado:
«Lo que sorprendió fue el resurgimiento de los sistemas de servidores preconfigurados, cuyos ingresos aumentaron en un 10,7% en 2018. Si bien esto no fue consistente durante el año, hubo un fuerte crecimiento en varios meses, incluido un aumento interanual del 47,3% en septiembre. Aunque el aumento de los ingresos fue en gran parte motivado por las actualizaciones de servidores, no hubo un crecimiento correspondiente en las ventas por unidad y éstas disminuyeron de manera constante, incluso a medida que el valor de las configuraciones del servidor aumentó debido al uso de componentes de SSD y RAM».
Entre los datos más interesantes destaca el crecimiento interanual de los ingresos de las actualizaciones de RAM, que disminuyó a medida que avanzaba el año y se volvió negativo en diciembre. En total cerró 2018 con una subida del 14,3%. Por contra los ingresos por actualizaciones de HDD se redujeron en un 6,4% año sobre año, un declive que se explica por la prioridad que los clientes dieron a los SSD, cuyos ingresos, en cambio, subieron un 22% en 2018.
Por último CONTEXT ha confirmado que la renovación de componentes también dio un impulso a las ventas de procesadores Intel Xeon, sobre todo a partir de septiembre de 2018, tras el aviso de los problemas de suministro que lanzó el gigante del chip.