El peor año de la historia de los smartphones. Los envíos, calculados por IDC, fueron un 4,1% más bajos en 2018 alcanzando los 1.400 millones de unidades. El último trimestre, tradicionalmente buena para este segmento, supuso una caída de 4,9% confirmando que la maduración de este nicho es una realidad que deja 5 trimestres consecutivos de bajadas.
Las razones por las que se ha llegado a esta situación las comenta Ryan Reith, vicepresidentes del área de movilidad de la consultora:
Entre las razones para estos resultados están la desaceleración en los ciclos de reemplazo, el aumento de la penetración en los grandes mercados, la incertidumbre económica y política, y la frustración por la continúa subida de los precios».
Pero hay más. La crisis de los smartphones también está en las grandes potencias que hasta ahora han movido el sector. El volumen de envíos en China, con un 30% de la demanda mundial, descendió un 10% obligando a que todo el mercado se resienta.
El 70% del mercado está en manos de 5 fabricantes
Samsung, Apple, Huawei, OPPO y Xiaomi se reparten el 69% del segmento. Unas referencias que hace un año tenían el 63% y que evidencia que la reducida cuota que queda a repartir entre el resto de fabricantes. Los grandes afectados del declive móvil son los dos líderes naturales; Samsung cayó 8% puntos en su tasa interanual en 2018 mientras que Apple lo hizo un 3,2%. En el otro lado de la balanza Huawei y Xiaomi con subidas del 33,6% y 33,2%, respectivamente.
Para ver de una forma más gráfica la evolución de los fabricantes podemos mirar el esquema presentado por la consultora. En ella vemos cómo han ido variando su cuota de mercado durante 2018. Salvo OPPO y Xiaomi que han tenido comportamiento muy lineales durante todo el año, el resto han sufrido grandes variaciones; Samsung comenzó con fuerza y se fue desinflando a medida que la saturación móvil era más evidente. Por su parte, Huawei empezó con una fuerte caída que casi se compensó a final de año. Apple, sin embargo, ha tenido más altibajos que se han sostenido al final.
La gran pregunta que los analistas de la firma contestan: 2019 será un año de declive. Nada vaticina que la situación vaya a cambiar en exceso sino que el descenso continuará. Tan solo el despegue del 5G y los dispositivos plegables ponen algo de luz en un sector que lleva tiempo sin mostrar grandes novedades que llamen la atención.
Para hacer frente a esta ralentización, IDC propone a los fabricantes equilibrar las últimas innovaciones con dispositivos funcionales, prácticos y con un diseño atractivo. En el caso de los vendedores, el objetivo debe estar puesto en potenciar las renovaciones ofreciendo valor añadido que empuje la demanda.
Imagen | Gaelle Marcel