Hoy es el día señalado por la Unión Europea para la entrada en vigor de la nueva normativa comunitaria que pone fin al bloqueo geográfico para las compras online de tiendas que se encuentren en cualquier Estado miembro.
Es un cambio muy importante tanto para los vendedores como para los compradores, ya que significa que los primeros podrían ampliar sus horizontes y vender sin problemas a cualquier cliente que compre desde uno de los 28 Estados miembros de la Unión Europea, y los segundos tendrán a su alcance una oferta más amplia.
La Comisión Europea ha confirmado esta buena noticia y ha explicado en una información oficial el consumidor ya no tendrá que hacer frente a obstáculos artificiales e injustificados, como por ejemplo el desvío hacia un sitio web específico, algo habitual al visitar una tienda online distinta a la que establece el vendedor para el país del cliente, o la exigencia de pagar con una tarjeta de débito o de crédito de un país concreto.
Con la entrada en vigor de esta normativa se pone fin al bloqueo geográfico, y a la discriminación por razón de nacionalidad o de lugar de residencia. A partir de ahora, todos los europeos recibirán el mismo trato por parte de todos los minoristas online, y podrán comprar en todos ellos sin ningún tipo de problema. Teniendo en cuenta que uno de los principales objetivos de la Unión Europea era derribar las barreras comerciales entre Estados miembros no hay duda de que estamos ante un movimiento natural y lleno de sentido.
En su comunicado oficial la propia Comisión Europea define el bloque geográfico como un problema grave para la unión, una barrera innecesaria que como dijimos va contra el propio espíritu de Europa y que actúa como freno a los minoristas, pudiendo limitar sus ingresos y sus oportunidades de negocio y de crecimiento, y como limitación para los consumidores, que tienen menos opciones entre las que elegir. Con la nueva normativa todo esto llega a su fin, una buena noticia tanto para empresas como para clientes.