La memoria DDR4 lleva varios trimestres consecutivos con un precio muy elevado. Esta situación se debe a la alta demanda y a la incapacidad de los principales fabricantes de cubrir las necesidades de sus clientes.
Ya hemos hablado sobre ello en artículos anteriores, y hemos visto que no había una solución a la vista ni a corto ni a medio plazo. Sin embargo, los problemas por parte de Intel para cubrir la demanda de procesadores y chipsets en proceso de 14 nm han generado previsiones importantes que apuntan una bajada del precio de la memoria DDR4.
La vinculación entre estos componentes es evidente y esa bajada de precio tiene una explicación sencilla: los fabricantes de equipos originales no han podido asegurar en su mayoría un alto suministro de procesadores Intel Whiskey Lake y de los chipsets necesarios, así que sus necesidades de memoria DDR4 son más bajas de lo que se esperaba.
Esto quiere decir que habrá menos demanda de memoria RAM por el menor suministro de procesadores Intel en proceso de 14 nm, un escenario perfecto para que por fin empiecen a bajar los precios de dicho componente.
Durante el último año el precio de los contratos de suministro de chips de DRAM, clave para la fabricación de memorias RAM, ha llegado a triplicarse. Esto ha obligado a los principales vendedores ejecutar una subida de precios que llegó a doblar el coste de los módulos de DDR4.
Según los últimos análisis e informaciones esa bajada de precios podría mantenerse durante todo el cuarto trimestre de 2018, pero los problemas de suministro que azotan al mercado de la DRAM no empezarán a resolverse de forma efectiva hasta la primera mitad de 2019, lo que significa que podrían producirse nuevas subidas de precios en los próximos trimestres.