Podríamos decir que es el PcComponentes de Francia. Y no exageramos si tenemos en cuenta que factura anualmente casi 500 millones de euros, y cuenta con 1.000 empleados y 28 tiendas en el país galo. LDLC lleva un tiempo explorando España pero es ahora cuando dará el golpe maestro con dos tiendas físicas en Madrid y Barcelona.
Con Marc Rodriguez Chuet al frente de la filial en nuestro país, el gigante francés prevé desembarcar en España con sus dos primeras tiendas de tecnología en posiciones privilegiadas. El Paseo de la Castellana, 144 será la ubicación de 1.000 metros cuadrados en Madrid mientras que Barcelona la firma ha escogido un espacio de 600 metros cuadrados en la Avenida Diagonal.
LDLC llega para atender al público más entusiasta de la tecnología. Por ello, su establecimiento físico en Barcelona estará diseñado en forma de placa base; en forma de U invertida contará con sillas y mesas en forma de chip. Cada zona representará un área de producto donde tendrá espacio el gaming, informática general, audiovisual, entretenimiento…
Además de la zona de exposición, la firma contará en sus puntos de venta con un taller de reparación y configuración personalizada para atender las demandas más concretas de los clientes.
Desde la tienda on-line, LDLC ofrecerá un catálogo de 30.000 productos relacionados con la tecnología. Eso sí, por el momento, no se puede consultar en español.
El Grupo LDLC llega a España con una buena cosecha hecha en Francia. Con una facturación en 2016 de casi 500 millones y unos beneficios de 77 millones de euros, la corporación se ha convertido en un referente en nuestro país vecino con cerca de 30 tiendas. Su principal credencial es su calidad de servicio que no siempre supone ser la alternativa más económica.
Sin embargo, en nuestro mercado llega con todo por hacer. Sin ningún tipo de nombre, LDLC debe hacerse ver entre todas las alternativas ya consolidadas. Pccomponentes, Media Markt o Worten son sus principales competidores en un terreno muy competitivo donde los consumidores cada día se dejan más llevar por el precio.
¿Qué te parece la propuesta? ¿Crees que conseguirá hacerse un espacio en España?