La seguridad se ha convertido en uno de esos «campos dorados» donde el canal de distribución tecnológico está viendo una gran oportunidad. Empresas preocupadas por sus posibles vulnerabilidades, integraciones donde no puede faltar una capa de seguridad o directamente brecha de seguridad ya atacadas son los temas más cotidianos.
Sin embargo, los proveedores de seguridad ya no pueden ser un simple partner que vende seguridad. La seguridad gestionada se ha vuelto parte de su día a día en un momento en el que las organizaciones necesitan algo más que una solución que les proteja; quieren a un compañero que esté al otro lado del teléfono y les suministre todo el apoyo necesario.
En este sentido, y como proveedores de seguridad gestionada (MSSP), podemos aportar un buen servicio de asesoramiento, consultoría o resolución de problemas. Pero ¿podemos ir más allá? ¿con qué servicios podemos rentabilizar esa especialización? Te mostramos algunos:
No es ningún misterio que el eslabón más débil entre un cibercriminal y un dispositivo es el propio usuario. Muchas brechas, intrusiones o ciberataques entran por los errores humanos que, en muchos casos, son evitables.
Un servicio de un MSSP puede ser la diferencia entre un ciberataque exitoso y uno fracasado. Configurar formación a los empleados en las empresas, instaurar políticas de concienciación frente a amenazas comunes o ayudar a identificar y mitigar estas amenazas puede ahorrar mucho dinero a los clientes finales.
Los procedimientos adoptados por las empresas para identificar y mitigar los riesgos operativos y legales afectan a sectores de muy diferentes índole. Sin ir más lejos la GDPR, de reciente vigencia, propone un nuevo marco europeo donde las compañías deben adoptar diferentes mecanismos para tener todos los datos personales protegidos.
Conocer todas las regulaciones y estar preparados con todas las garantías es un trabajo de especialización que el MSSP puede aportar como un servicio de valor añadido. Esto ayudará a los clientes a ahorrarse muchos disgustos en forma de multas o ciberataques.
Siendo uno de los nichos de ciberseguridad que más despunta, todavía es un segmento con demasiadas vulnerabilidades desconocidas para muchas organizaciones. VPN sin proteger, autentificaciones de un solo paso o ausencia de encriptación de datos son fallos cotidianos que pueden poner en peligro toda una compañía.
Las soluciones relacionadas con la administración y control de personal pueden ser muy eficaces siempre y cuando se usen con las credenciales adecuadas. Ahí es donde un proveedor de seguridad gestionada puede aportar su experiencia.
Aunque la protección de los servicios y aplicaciones empresariales es el principal foco de muchos proveedores de seguridad gestionada, no debe ser el único punto crítico a cuidar.
Los servicios de protección de datos de usuarios e información, en líneas más generales, suponen un extra. Un valor donde no solo se proteger en Endopint o la gestión de cuenta sino también todo lo relativo a los empleados y recursos de las empresas.
La mayoría de las organizaciones no sabe hasta qué punto es seguro o inseguro su infraestructura. De hecho, esta falta de conciencia es una de las principales bazas de los cibercriminales.
Y es ahí donde entran en juego los MSSP y sus servicios de auditoria. Estos proveedores pueden aportar análisis regulares que testeen las soluciones, los usos o las posibles entradas o riesgos.
Imagen | Elijah O’Donell