Las ventas de smartwatches Android están estancadas mientras que Apple domina completamente el mercado con sus relojes inteligentes Watch. Los motivos son conocidos. Por un lado, el retraso de Google en el despliegue del sistema operativo Wear OS que ha reemplazado al Android Wear anterior y por otro, la falta de inversión de Qualcomm en relojes inteligentes.
Samsung es el socio principal de Google en Android y las ventas del mayor productor mundial de smartphones suman a la plataforma como ninguna. Sin embargo, Samsung no emplea los derivados de Android en todos sus productos, como televisores o relojes inteligentes donde usa otro Linux móvil como Tizen OS.
Samsung incluso creó una marca para ello, utilizando “Gear” y no Galaxy que está reservada para Android. Los resultados no han sido buenos. Las ventas de smartwatches Android son irrelevantes, mientras que Samsung tampoco ha obtenido buenos resultados y está por detrás de Apple, Fitbit y Xiaomi en wearables.
Se impone una alianza de Samsung y Google en smartwatches y así lo explican medios estadounidenses con el anuncio de un Galaxy Watch que podría cambiar el rumbo del mercado. Samsung aprovecharía su gran imagen de marca con Galaxy, sus chips propios Exynos tan avanzados como los de Qualcomm y la enorme base instalada de móviles inteligentes a los que se conectan.
Además de hardware, otra base para salvar los smartwatches Android de la irrelevancia sería el nuevo sistema operativo Wear OS, basado en Android y bajo el paraguas de Google, que ha recibido una gran mejora frente a sistemas anteriores e indudablemente y más allá de sus diferencias técnicas, tiene más potencial, apps y desarrolladores que Tizen.
Galaxy Watch no está confirmado, pero los analistas consideran imprescindible la unión de Samsung y Google para evitar que Apple arrase en el segmento de relojes inteligentes.