Pixel y Pixel XL han sido retirados de la Google Store y de la tienda Project Fi, lo que sugiere la retirada de la primera generación de esta serie de móviles inteligentes de marca propia de Google.
Los problemas iniciales de stock de Google, una red de distribución minúscula sin apoyo del canal minorista (por decisión de Google) y el gran aumento de precios sobre los anteriores Nexus, han resultado en unas ventas más tibias de lo esperado para estos terminales.
Google consiguió mejorar el suministro e implementó algunos descuentos especialmente tras la segunda generación, Pixel 2, pero la realidad es que las ventas no han mejorado y Google solo vendió 3,9 millones de unidades en 2017, según IDC.
Por un tiempo se pensó que Google emplearía una estrategia similar a Apple, manteniendo series anteriores a los tope de gama rebajados de precio para aumentar las ventas. No es el caso y la firma dice adiós a los Pixel, aseguran medios estadounidenses. Hay rumores de la próxima comercialización de un terminal Pixel de gama media más económico, pero no está confirmado.
Google: más Android, menos móviles propios
Google no está preocupado. La comercialización de terminales propios es una parte ínfima de su negocio en Android, la plataforma que simplemente arrasa en movilidad y con ello, Google amplía sus aplicaciones y servicios que van instalados en cada uno de ellos y le permiten dominar Internet, el mercado de las búsquedas y el de la publicidad.
Google maneja la distribución de Android de varias formas. Lo entrega libre de royalties a centenares de fabricantes para la creación de dispositivos, comercializa los suyos propios y tiene programas a medio camino entre los anteriores, controlando el programa, pero bajo marca y fabricación por terceros. Este tipo de programas son los que quiere potenciar como vimos en el pasado MWC.
Por un lado Android Go, una variante ligera del sistema operativo móvil de Google actualizado a la última versión, Android 8, y optimizada para smartphones de gama de entrada a la plataforma, y por otro, Android One, también actualizado a la última versión del sistema, Oreo. en la versión ‘stock’, la versión de Android “más pura”. En ambos casos Google se encargan del importante apartado de las actualizaciones de los terminales.