El gigante chino ha confirmado que producirá coches autónomos en masa a partir de 2019, una fecha muy cercana, tanto que incluso ha planteado algunas dudas sobre su viabilidad.
En su momento Baidu intentó llevar a cabo una alianza estratégica con BMW para poder sacar adelante este proyecto pero la idea no llegó a buen puerto, así que han tenido que buscar apoyo en otras empresas para poder cumplir con sus planes.
Ahora sabemos que la compañía producirá coches autónomos gracias a la colaboración de BAIC, un fabricante chino de automóviles de titularidad estatal que agrupa a varias marcas muy conocidas en el país y que tiene recursos más que suficientes para enfrentar un plan tan ambicioso.
En teoría los planes de Baidu tendrán dos fases ya definidas y bien diferenciadas. La primera fase supone la producción en masa de coches autónomos de nivel 3 en 2019, es decir capaces de conducción con un grado de autonomía similar al que podemos encontrar actualmente en los coches Tesla.
Esto quiere decir que no serán coches totalmente autónomos y que la figura del conductor seguirá estando presente en esos modelos de primera hornada.
La segunda fase supone el salto a la fabricación de coches autónomos de nivel 4, un salto importante que se producirá a partir de 2021, siempre que no haya problemas ni retrasos en el cumplimiento de la primera fase que ya hemos descrito.
En los coches autónomos de nivel cuatro ya no es necesario contar con la figura de un conductor que pueda actuar en caso de fallo del sistema, ya que éste cuenta con tecnología de respaldo que puede intervenir para solventar situaciones de riesgo.
