Antes de la salida del iPhone X ya se conocían los posibles problemas de abastecimiento que podía tener. Y estos se han confirmado. Algunos de los proveedores taiwaneses aseguran desde Digitimes que solo tienen listo el 40% de la producción que inicialmente se había planificado.
Aunque todavía no se puede ni reservar -las prereservas se abrirán el 27 de octubre con disponibilidad a comienzos de noviembre-, el bajo suministro de partes y componentes de Apple ya es un hecho con el que parece que el gigante quiere salvaguardarse las espaldas.
La reducción parece que viene dada desde Cupertino. Apple adoptó la misma estrategia con el iPhone 7 en 2016 que solo tenía el 60% de la producción preparada para cuando el fabricante lo necesitaba. Uno o dos meses más tarde se puso en marcha el 40% restante.
No en vano es una estrategia lógica. El iPhone X es el móvil más caro de la historia, no tanto por los materiales empleados sino más bien por el marketing de Apple. Un precio que hace que vender una cantidad a la altura de la segunda marca de móviles en el mundo sea un reto. ¿Lo conseguirá?