Durante el mes de julio los ingresos de GIGABYTE han experimentado un crecimiento del 26,29%, un dato muy positivo para la compañía que evidencia una evolución positiva y cierra un crecimiento sostenido que se ha mantenido durante los tres últimos meses.
Como podemos ver en el cuadro que adjuntamos los ingresos de GIGABYTE alcanzaron los 5.852 millones de dólares taiwaneses (193,72 millones de dólares al cambio), cifra que representa como dijimos un crecimiento del 26,29% año sobre año (comparado con el mes de julio de 2016).
Haciendo una comparativa mes sobre mes nos encontramos con un crecimiento del 5,6% (5.541 millones de dólares taiwaneses en junio), un dato modesto pero igualmente positivo.
En lo que llevamos de año GIGABYTE ha obtenido unos ingresos de 33.149 millones de dólares taiwaneses (1.097 millones de dólares), una cantidad que comparada año sobre año (mismo periodo del año anterior) representa un crecimiento del 11,44%.
Números muy buenos que nos dejan además una predicción bastante favorable para GIGABYTE, sobre todo por dos grandes razones. La primera es que la demanda de tarjetas gráficas se encuentra en un punto álgido gracias a la minería de criptomonedas, una tendencia que en principio no va a cambiar a corto plazo.
La segunda es que el lanzamiento de los procesadores Threadripper de AMD y de los Coffee Lake de Intel será un estímulo importante para las ventas de nuevas placas base, imprescindibles para los consumidores que quieran actualizar sus equipos o montar uno nuevo.
Con esas dos claves en mente y viendo los resultados que acumula GIGABYTE durante la primera mitad del año podemos sacar en claro que 2017 podría ser uno de los mejores para la compañía taiwanesa.
