Fue el país que le vio nacer, el que le ha visto crecer y donde llegan primero todas las novedades. Sin embargo, Estados Unidos no es el territorio que más ayuda a Amazon en su cuenta de resultados. Tan solo un 8% de las ventas de Amazon llegan desde Estados Unidos.
El gráfico que muestran en Business Insider demuestra el origen de las ventas en 2016 con un desglose por las principales potencial para Amazon. Alemania encabeza el listado con el 10% de los ingresos, por detrás y al mismo nivel Estados Unidos y Japón con un 8%. Cierra el cuartero Reino Unido, con un 7%. El mayor grueso se lo lleva el resto del mundo donde se genera el 67% de la demanda y está incluido España.
Aunque en el cómputo total pueda parecer poca la representación de Estados Unidos en los números del gigante, lo cierto es que los hitos conseguidos en su país oriundo son muchos. Estamos hablando de unas ventas que supusieron 10.880 millones de dólares o dicho de otra forma, el 35% de las ventas on-line en EEUU, segúnBain & Company. Una cifra suficientemente interesante que podría alzancar el 50% en 2020.
Amazon genera el 35% de las ventas on-line de EEUU
Carácter internacional
Hace mucho tiempo que Amazon buscó fuera de Estados Unidos más negocio. Jeff Bezos desde el principio que tenía que arriesgar para conseguir levantar el imperio con el que cuenta hoy en día. Tanto es así que incluso su plan de empresa preveía cuatro o cinco años de pérdidas, algo insostenible para muchos otros negocios.
Y su planteamiento internacional le ha salido redondo. La réplica de lo que comenzó a construir en Estados Unidos en otros países le ha ayudado a convertirse en la primera referencia mundial a nivel de comercio electrónico generando unos ingresos de 136.000 millones de dólares en 2016.
Sin embargo, su despliegue internacional ha sido pausado. A España, por ejemplo, llegó 16 años después de su fundación. Amazon desembarcó el 15 de septiembre de 2011 y desde entonces no ha hecho nada más que crecer y crecer siendo todavía un territorio en el que aglutina pérdidas.
Pese a contar con cuentas de resultados negativas, Amazon parece tener claro que la expasión de sus tentáculos es la mejor manera de crecer. Lo sigue haciendo mirando con ojos golosos al continente asiático. Aunque esto le lleve a tener problemas logísticos en algunos países como Japón, el gigante es consciente de la oportunidad que representa pero seguramente también sabe que no es un terreno fácil con rivales como Alibaba.