Pese al imperio que ha montado Apple alrededor de sus más de 300 tiendas, estas solo están en 19 de los más de 190 países de todo el mundo. Un reducido número que hace que el gigante escoja muy bien los lugares en los que aposenta su red física comercial. Y así lo hace elevando su rentabilidad a niveles con los que pocas empresas cuentan.
Estados Unidos, como no podía ser de otra manera, se lleva la palma con China y Reino Unido a mucha distancia por detrás. En el caso del territorio oriundo, Apple cuenta con 270 tiendas oficiales. Entre las más emblemáticas podemos citar la de la Quinta Avenida en Nueva York u otras más nostálgicas como la situada muy cerca del campus de la Universidad de Stanford a escasos minutos de la fuera la casa de Steve Jobs en Palo Alto (California).
China es el siguiente país con más Apple Store. 40 comercios que consiguió abrir después de muchas trabas de un gobierno proteccionista. Aún así, el despliegue comercial evidencia el potencial de consumidores que hay en el país asiático, pese a que las ventas de iPhone hayan caído.
En Europa el país más concurrido de Apple Store es Reino Unido. Con 38 tiendas cuenta con referencias como la Covent Garden en Londres. En España también contamos con insignias como la de la Puerta del Sol en Madrid o el Banco Central de Crédito de Barcelona reconvertido en una tienda de la casa de los iPhone. en total 11 establecimientos que se unen a los 20 en Francia, 16, en Italia y 14, en Alemania.
Curiosamente no encontramos tiendas en África, Europa Central y prácticamente todo Asia -salvo China e India- no tienen un comercio de la marca. Zonas, que para Apple, parece que no tienen un valor tan significativo.