La segunda referencia de comercio electrónico en España sigue dando sus particulares pasos para retar a otros como Amazon. Pero quizás su camino hace tiempo que haya sido recorridos por otros. Y quizás ese sea uno de los graves problemas de El Corte Inglés, que llega tarde.
La pasada semana El Corte Inglés anunciaba que añadía a su servicio logística una funcionalidad extra: las franjas horarias. De esta forma, los clientes podían elegir el día y el tramo de horas en las que querían recibir el pedido realizado. Este valor se integraba en 27 ciudades españoles y era vigente para 120.000 productos vendidos por los grandes almacenes.
El servicio de logística cuesta 7,90 euros y se integra con el hace unos meses anunciado de la entrega en dos horas. Ambas están sujetas no solo a la disponibilidad del artículo comprado sino también de la ciudad de destino.
Un paso por detrás
¿Es revolucionaria la logística por tramos horarios? Pese a ser vendido así por la corporación, para nada. Simplemente es una mejora interesante y de valor que ya lleva tiempo siendo un estándar en muchas otras tiendas on-line. Un punto que siendo El Corte Inglés hace tiempo que debería ser una realidad.
Referentes en distribución como Mercadona, que no es precisamente el mejor ejemplo de comercio electrónico, ya cuentan desde hace mucho tiempo con esta opción. Un valor extra que recae en las empresas de mensajería que están haciendo un esfuerzo extra para aclimatarse a estas necesidades.
Pese a todos los esfuerzos por apuntar a una estrategia digital, El Corte Inglés le está costando adaptarse a la nueva era de las compras. Un momento en el que hasta figuras más pequeñas como PcComponentes están dando valor a sus compras vía logística y creando una verdadera omnicanalidad que tanto exige el cliente.